JUAN EL BAUTISTA: UN PROFETA DEL ISLAM
Entre los 25 Profetas mencionados por Dios en el Corán, se encuentra el nombre del Profeta Juan (la paz sea con él). En árabe, se llama Yahia. También es un profeta que ocupa un lugar destacado en el cristianismo, donde se le conoce como Juan el Bautista. Su historia en la tradición cristiana se describe en Lucas 1: 5-22.
En el Islam, la creencia en todos los profetas de Dios es un artículo fundamental de fe. Una persona que niega creer en cualquiera de los Profetas, sea Jesús (la paz sea con él) Moisés (la paz sea con él), o cualquiera de los demás abandona el redil del Islam.
SU NACIMIENTO MILAGROSO
El profeta Jesús (la paz sea con él) no fue el único profeta que nació milagrosamente. Por milagroso, queremos decir fuera del proceso normal de reproducción humana que Dios ha ordenado, lo que requiere que un hombre y una mujer conciban un hijo. En el caso de Jesús (la paz sea con él), esto significaba haber nacido de una madre pero no de un padre.
Pero el nacimiento del Profeta Adán (la paz sea con él) fue aún más milagroso en este sentido, ya que fue creado sin madre ni padre. Del mismo modo, Hawwa o Eva (que Dios esté complacido con ella) fue creada por un hombre, su esposo y sin padres.
El nacimiento del profeta Juan (la paz sea con él) es milagroso porque es el hijo de una madre estéril y un padre anciano. Cabe señalar que su padre también era un profeta, llamado Zacarías o Zakariya (la paz sea con él).
[Le dijo un ángel:] «¡Oh, Zacarías! Te albricio con un hijo al que pondrás por nombre Juan. Nadie ha sido llamado así antes que él». Dijo: «¡Señor mío! ¿Cómo he de tener un hijo si mi mujer es estéril y yo he llegado ya a la vejez extrema?» Dijo [el ángel]: «Así será, pues tu Señor dice: ‘Eso es fácil para Mí, te he creado antes, cuando no existías’» (Corán 19:7-9).
Exclamó: «¡Señor mío! ¿Cómo podré tener un hijo si soy anciano y mi mujer estéril?» Le respondió [el ángel]: «¡Así será! Porque Dios hace lo que quiere» (Corán 3:40).
Con el nacimiento de Juan, Dios le concedió a Zacarías (la paz sea con él) su deseo de tener un heredero.
Cuando [el Profeta] Zacarías rogó a su Señor: «¡Oh, Señor mío! No me dejes solo [sin hijos]. Tú eres Quien concede descendencia». Respondí su súplica y le agracié con [su hijo] Juan, haciendo que su mujer fuera otra vez fértil. Los agracié porque siempre se apresuraban a realizar obras buenas, Me invocaban con temor y esperanza, y eran humildes ante Mí (Corán 21:89-90).
LAS BELLAS CUALIDADES DE JUAN
Dios no solo le otorgó milagrosamente a Zacarías (PyB) un hijo. Hizo de este niño una bendición para sus padres y de hermoso carácter. El profeta Juan (PyB) es descrito en el Corán como casto y justo.
En el templo, Zacarías invocó a su Señor diciendo: «¡Señor mío! Concédeme una descendencia piadosa, Tú escuchas los ruegos». Entonces los ángeles lo llamaron cuando oraba en el templo diciendo: «Dios te anuncia el nacimiento de Juan, quien corroborará la Palabra de Dios, será noble, casto y un Profeta virtuoso» (Corán 3:38-39).
[Cuando su hijo alcanzó la pubertad, le dije:] «¡Oh, Juan! Aférrate al Libro con firmeza». Le concedí sabiduría desde su infancia, que fuera compasivo, puro y piadoso, honraba a sus padres, no era soberbio ni desobediente. La paz fue con él el día que nació, el día que falleció y será con él el día que sea resucitado. (Corán 19: 12-15).
PARTE DE UNA LÍNEA DE HONRADOS PROFETAS
Finalmente, como se mencionó anteriormente, el Profeta Juan (la paz sea con él) es uno de los Profetas en los que los musulmanes deben creer. Es uno de los 25 mencionados en el Corán.
Lo agracié [a Abraham] con Isaac y [a este con] Jacob, a quienes concedí la guía. A Noé también lo había guiado en la antigüedad. Y de sus descendientes [también guie] a David, Salomón, Job, José, Moisés y Aarón. Así es como recompenso a los que hacen el bien. Y a Zacarías, Juan, Jesús y Elías; todos ellos se contaron entre los piadosos (Corán 6:84-85).