CELEBRANDO A AL-BIRUNI: UN GENIO Y POLÍMATA MUSULMÁN
Por Abdullahi Jamaa
Los avances científicos no llegaron en bandeja de plata. Fueron necesarios hombres y mujeres a lo largo de los siglos para crear las innovaciones de las que nos beneficiamos hoy, y los científicos musulmanes no estuvieron menos involucrados que otros. Uno de esos académicos de renombre fue el gran científico persa Aburayhan Al-Biruni.
Al-Biruni saltó a la fama durante la Edad de Oro de la civilización islámica, que posiblemente se extendió entre 750 e. c. y 1258 e.c.
“Al-Biruni es uno de los más grandes científicos de todos los tiempos”, dijo a AboutIslam.net Mohamed Said Abdi, profesor de secundaria de Estudios Islámicos. «Estudió tantas ramas de la ciencia e hizo mucho trabajo práctico en una serie de innovaciones científicas».
Al-Biruni ha tenido una influencia considerable en la ciencia moderna, pero ninguno de sus trabajos fue traducido a idiomas occidentales hasta el siglo XX.
“Su influencia como científico musulmán es legítima. Pero en el estudio de la Historia no se le concedió el tipo de publicidad que necesitaba, como la que se les dio a los científicos del Renacimiento en Europa”, dice Fatuma Saman, profesora de Historia y directora de la Academia Musulmana de Nairobi.
“Este fenómeno no solo afectó a Al-Biruni, sino a muchos científicos medievales musulmanes cuyos descubrimientos ambiciosos e innovadores fueron escondidos debajo de los estantes solo para acumular polvo”.
Sin embargo, los historiadores creen que el papel que desempeñó Al-Biruni en los descubrimientos científicos es, con mucho, uno de logros notables no solo entre los académicos musulmanes, sino entre los científicos de todos los tiempos.
POLÍMATA
Nacido el 4 de septiembre de 973 en Juaresm, Jorasán (actual Uzbekistán), Al-Biruni estudió ciencias incansablemente hasta su muerte en 1052.
Según muchas fuentes históricas, Al-Biruni fue uno de los científicos más destacados de toda la Edad Media.
Se hizo legendario por su intelecto e ingenio para producir ciencia revolucionaria, dejando una huella imborrable en los estudios de tantas disciplinas. En el lenguaje académico, se le considera un polímata. No dejó nada al azar en su ambición ilimitada por hacer avanzar la comprensión científica de su época.
Tenía un pie en cada actividad, desde la voluminosa antropología hasta la compleja astronomía y astrología; de la química compuesta a la sociología comparada; de las matemáticas científicas a la física fenoménica; y, aún más exigente, desde la psicología del comportamiento hasta la filosofía de los principios.
Está registrado que dijo: «Comencé con la geometría y procedí a la aritmética y la ciencia de los números, luego a la estructura del Universo y finalmente a la astrología, porque nadie es digno del estilo y título de astrólogo si no está completamente versado en estas cuatro ciencias”.
El astrólogo renacentista inglés William Lilly en su libro «Astrología cristiana» describió a Al-Biruni como un hombre de gran sabiduría con un deseo inigualable por la ciencia durante la Edad Media.
Ilustración del eclipse lunar por Al-Biruni
“Excelente polemista o lógico, argumentando con erudición y discreción, y usando mucha elocuencia en su discurso, un buscador de todo tipo de misterios y erudición, agudo e ingenioso, aprendiendo casi cualquier cosa sin un maestro; ambicioso de ser exquisito en todas las ciencias, deseoso naturalmente de viajar y conocer partes extranjeras: un hombre de imaginación incansable, curioso en la búsqueda de cualquier conocimiento oculto; capaz por su propio genio de producir maravillas”, escribió Lilly.
Se dice que Al-Biruni es el primer hombre en llevar a cabo elaborados experimentos relacionados con los acontecimientos astronómicos. Pragmáticamente experimentó y describió el eclipse solar del 8 de abril de 1019 y el eclipse lunar del 17 de septiembre de 1019.
En 1031, Al-Biruni concluyó una enciclopedia astronómica completa llamada Kitab al-Qanun al-Mas’udi (latinizado como «Canon Mas’udicus») en la que registró sus resultados astronómicos e inventó tablas astronómicas con conclusiones lógicas.
Según la Enciclopedia Británica, la aportación original de Al-Biruni a la astronomía y la astrología se nota claramente en casi todos los capítulos del libro.
“Al-Biruni trazó una distinción sutil entre el movimiento del apogeo solar y el movimiento de precesión y exploró muchas otras técnicas matemáticas aplicadas para lograr una precisión mucho mayor y facilidad de uso de los resultados astronómicos tabulados”, afirma Britannica.
Según el sitio web MacTutor History of Mathematics Archive, mantenido por el profesor John J. O’Connor y Edmund F. Robertson en la Universidad de St Andrews, Escocia, Al-Biruni determinó la latitud de su ciudad natal utilizando la altitud máxima del Sol en la tierna edad de 17 años.
“Al-Biruni también hizo contribuciones importantes a la geodesia y la geografía. Introdujo técnicas para medir la Tierra y las distancias sobre ella mediante la triangulación. Encontró que el radio de la Tierra era de 6.339,6 km, un valor que no se obtuvo en Occidente hasta el siglo XVI”, explica el sitio web.
146 LIBROS
El científico musulmán también se devanaba los sesos para exponer y estudiar piedras preciosas y metales. La mineralogía fue uno de sus mejores descubrimientos y aquí dio lo mejor de sí para medir con precisión las densidades de los minerales.
Se dice que describió alrededor de 100 minerales conocidos, sus variedades de rocas, así como características como el color, la dureza, la producción y el costo.
“Esta importante referencia sobre las piedras preciosas fue citada por muchos científicos posteriores. Es el tercer texto auténtico conocido sobre mineralogía y la misma precisión en la medición de la densidad no se logró en Europa hasta el siglo XVIII”, escribió James Sandusky Aber, profesor de Geología, en su obra Historia de la Geología.
En otra parte de la antropología, estudió la comunidad india de su siglo, convirtiéndose así en el padre de la indología. Sus notables logros en el estudio de la Historia, la filosofía y la Medicina de la India le valieron el título de «el primer antropólogo».
Según muchos historiadores, la conquista mundial entusiasta de la antropología moderna no podría haber sido fácil sin la huella pionera de Al-Biruni.
En pocas palabras, las obras de Al-Biruni suman un total de 146 libros. Estos incluyen 35 libros sobre astronomía, 4 sobre astrolabios, 23 sobre astrología, 5 sobre cronología, 2 sobre medición del tiempo, 9 sobre geografía, 10 sobre geodesia y teoría cartográfica, 15 sobre matemáticas, 2 sobre mecánica, 2 sobre Medicina y Farmacología, 1 sobre meteorología, 2 sobre mineralogía y gemas, 4 sobre Historia, 2 sobre India, 3 sobre religión y filosofía, 16 obras literarias, 2 libros sobre magia y 9 libros sin clasificar.
Según los científicos, entre todas estas obras, solo 22 han sobrevivido y solo 13 de estas han sido publicadas.
Fuente: About Islam
Referencias:
James S. Aber. Abu Rayhan al-Biruni. History of Geology. 2003.
Jorge Saliba. Al-Bīrūnī. Enciclopedia Británica.
Michio Yano. Bīrūnī: Abū al‐Rayḥān Muḥammad ibn Aḥmad al‐Bīrūnī. 2007.