DESCRIPCIÓN DE LA SACHDA
“Él se apoyaba sobre las palmas (y las extendía)”217, “ponía sus dedos juntos”218 y “los apuntaba hacia la quibla”219
También “él las colocaba (sus palmas) a la altura de sus hombros”220 y algunas veces “a la altura de sus orejas”221.”Él ponía su nariz y frente sobre el suelo firmemente”.222
Aconsejó a “quien rezaba deplorablemente”: Cuando te prosternes, ponte firme en tu prosternación223. En otra versión: cuando te prosternes, pon tu rostro y manos firmemente abajo, hasta que todos tus miembros estén colocados apropiadamente”224.
También solía decir, “no hay oración para aquellos cuya nariz no toca el piso al igual que la frente”.225
“Él solía poner sus rodillas y pies abajo con firmeza”226, “apuntaba los dedos de los pies hacia la quibla”227, “juntaba sus talones”228, “ponía sus pies derechos”229 y “ordenó hacerlo del mismo modo”.230
215 Ibn Juzaima (1/76/1), Daracútni y Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi lo confirmó. Todos los hadices que lo contradicen son falsos. Este modo ha sido respaldado por Malik, e igualmente se reporta de Ahmed en el libro a-Tajquic (108/2) de Ibn al-Yauzi. También al-Maruazi lo anotó con un isnad sajíj, imám al-Auzái en su Masáil (1/147/1) al decir, “encontré a la gente posar sus manos antes que sus rodillas”.
216 Abu Daud, Tammám en al-Fauáid & Nasái en Sunan a-Sugra y Sunan al-Kubra (47/1) con un isnad sajíj. Abdul Jac lo declaró sajíj en al-Ajkám (54/1), y lo continuó en Kitáb a-Tajayud (56/1) diciendo: “tiene un isnad mejor que el previo”, o sea, el hadiz de Uá-il el cual lo dice de modo contrario (las rodillas antes que las manos). De hecho, el último hadiz, al ser contradictorio a este que es sajíj y al precedente, ni es auténtico en el isnád ni en el significado, como he explicado en mi libro Silsíla al-Ahadiz a-Daífa (No. 929) y en al-Irwá (357).
217 Abu Daud & Hakim, ambos lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
218 Ibn Juzaima, Baijaqui & Hakím lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
219 Baijaqui con un isnad sajíj. Ibn Abi Cheiba (1/82/2) y Sirách relataron el apuntar los dedos de los pies en una narración aparte.
220 Abu Daud & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj, como lo hizo Ibn al-Mulaquin (27/2), dado en el libro titulado Irwá (309)
221 Abu Daud y Nasái, con isnád sajíj.
222 Ibíd. 219
223 Abu Daud & Ahmed con isnád sajíj.
224 Ibn Juzaima (1/10/1) con isnád jásan.
225 Daracútni, Tabaráni (3/140/1) & Abu No’aim
De aquí se deduce eran siete los miembros que prosternaba el Profeta: las palmas, las rodillas, los pies, la frente con la nariz-considerando a estos dos últimos como un solo miembro de prosternación- como dijo el Profeta: Me ha sido ordenado prosternarme (en otra narración: se nos ha sido ordenado...) sobre siete huesos: sobre la frente...., y luego lo recalcó al mover sus mano alrededor de su nariz,... las manos (en otra versión: las palmas), las rodillas y los dedos de los pies, y no arremangar231 las túnicas y no recogerse el cabello.232
También solía decir, cuando un siervo se prosterna, los siete miembros lo hacen igual: su rostro, sus palmas, sus rodillas y sus pies.233
Acerca del hombre que rezó atrás de él con su cabello atado234, dijo: su ejemplo seguramente es como aquél que reza con sus manos atadas (atrás de su espalda)235. También dijo que es la montura del diablo, o sea, donde el diablo se sienta, refiriéndose a los nudos en el cabello.236
“Él no apoyaba sus antebrazos sobre el suelo”237, pero “los (dos los] alzaba por encima del piso, y los mantenía lejos de sus costados de modo que la blancura de sus sobacos pudiera ser vista desde atrás”238; también “ de modo que si un corderito o cabrito quería pasar por debajo de sus brazos, estos lo podrían hacer así”.239
226 Baijaqui con isnád sajíj. Ibn Abi Cheiba (1/82/2) & Sirach han relatado el apuntar los dedos de los pies en una narración diferente.
227 Bujari & Abu Daud. Ibn Sa’d (4/157) contado por Ibn Omar
228 Tajaui, Ibn Juzaima (No. 654) & Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
229 Baijaqui con isnád sajíj.
230 Tirmídi & Sirách; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi concordó.
231 O sea, halar y meter la ropa para que no se expanda, significando que se debe recoger la ropa o el cabello con las manos para el rukú y suyúd (Nihaya). Esta prohibición no se limita a no hacerlo en la oración; sino que la mayoría de los sabios que arremangarse la ropa o recogerse el cabello antes de la oración también es prohibido. Esto es patente cuando ellos prohíben a los hombres rezar con el cabello atado.
232 Bujari y Muslim. Se recoge de al-Irwá (310).
233 Muslim, Abu ‘Auána & Ibn Hibán.
234 O sea, amarrado o trenzado.
235 Muslim, abu ‘Auána & Ibn Hibbán. Ibn al-Azir dice al respecto: “El significado de este hadiz es que si el cabello esta suelto, debe este dejarse caer en el suelo en el momento de la sachda, por lo que la persona recibiría recompensa por la postración de tal cabello. Empero, si el cabello es atado, es como si no se hubiese prosternado, porque es parecido a quien cuyas manos son esposadas, ya que estas no pueden ponerse sobre el suelo en sachda”.
Esto solo se limita a los hombres, no a las mujeres, ya que Shaucani lo citó de Ibn al-‘Arabi.
236 Abu Daud & Tirmídi, quienes lo declararon jásan; Ibn Juzaima & Ibn Hibbán lo declararon sajíj. Consulte Sajíj Abbi Daud (653)
237 Bujari & Abu Daúd.
238 Bujari y Muslim. Consulte el Irwá (359)
239 Muslim, Abu ‘Auana & Ibn Hibbán.
El practicaba tal cosa hasta tal grado que uno de los Compañeros dijo, “solíamos tener lástima del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) por la manera en que tenía sus manos apartadas de sus costados”.240
Él solía ordenarlo del mismo modo, diciendo: cuando realicéis la sachda, colocad vuestras palmas (de las manos) (sobre el piso) y elevad vuestros codos,241 y aparejaos en el suyúd, y ninguno de vosotros debe extender los antebrazos al igual que los perros (en otra narración: ... como el perro los extiende).242Otro hadiz reza, ninguno de vosotros descanse los brazos sobre el suelo del mismo modo que los perros lo hacen.243
Él (Salallahu alehi wa salam) también solía decir: no extendáis vuestros brazos [del modo que las bestias de caza lo hacen], encimad vuestras palmas (en el piso) y mantened los brazos abiertos, porque cuando lo hacéis así, cada uno de vuestros miembros participa de la prosternación.244
EL ESTAR CÓMODOS EN EL SUYÚD ES UNA OBLIGACIÓN
Él (Salallahu alehi wa salam) solía ordenar que se completara el rukú y el suyúd, pues uno que no los hace bien es como un hambriento que come uno o dos dátiles, los cuales son inútiles para éste, añadiendo que él es ciertamente uno de los peores ladrones de entre la gente.
Él también advirtió a quien no tuviera su espinazo correctamente plano y recto en el rukú y en el suyúd, que la oración era inválida, como se lee en la sección previa del “Rukú” a quien “rezaba deplorablemente”.
LOS DIKERS DEL SUYÚD
He aquí algunas de las súplicas y recordatorios que hacia Alá decía el Profeta (Salallahu alehi wa salam) en esta posición:
1.- Subjána rabbial ‘ala.
240 Abu Daud & Ibn Maya con isnád jásan.
241 Muslim & Abu Áuana.
242 Bujari, Muslim, Abu Daud & Ahmed
243 Ahmed & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj.
244 Ibn Juzaima (1/80/2), al-Macdisi en su obra al-Mujtára & Hákim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
Alabado sea el Altísimo: lo decía tres veces.245 Aunque “él lo repetía más de tres”.246
Una vez lo repitió tantas veces que el suyúd se vuelve casi igual en tiempo a su posición erguida, la cual duró lo que recitó sura la Vaca, las Mujeres y al-Imrán. Dicha oración estuvo llena se súplicas y peticiones de perdón, como señalamos en las sección “Oración nocturna”.
2.- Subjána rabbial ‘ala ua bijamdijí.
Loa y Alabanzas al Altísimo (tres veces)247
3.- Subbuju cuddusun rabul maláika ua rúj
Santísimo el Señor de los ángeles y del Espíritu (santo).248
4.- Subjánaka Alájuma rabbana ua bijámdika Alájuma ígfir lí.
Alabado Seas ¡Oh nuestro loado Señor! ¡Oh Alá! Perdóname: lo cual era dicho a menudo en Rukú y suyúd, cumpliendo así una orden del Corán.249
5.- Alájuma sayádtu, ua bika amantu ua laka aslamtu, [Ua anta rabí], sayada uachji liladí jalácaju ua ssauáraju, [fa ájsana ssuáraju], ua shaqa sam’aju ua bassaraju, [fa] tabáraka láju ájsanul jáliquín.
¡Oh Alá! Ante Ti me prosterno y creo en Ti y por Ti me islamizo, [y Tú eres Mi Señor], Mi rostro se prosterna ante quien lo creó y dio forma, [pues es quien lo mejoró a la vista] ya que lo dotó de oído y visión, [así que] ¡Bendito Alá, el Mejor de los creadores!250
6.- Alájuma Igfir lí danbí kullaj, ua diccaju ua yílaj, ua auálaju ua ajíraj, ua ‘alániá ju ua sirraj.
¡Oh Alá! Perdona todos mis pecados; los mayores y los menores; del primero al último; y los públicos y secretos.251
7.- Sachada laka sauadí ua jabalí, ua ámana bika fu-adí, abu-ú bin’imatika ‘alaiia, jadaiia yadaiia ua ma yanaitu ‘ala nafsí.
245 Ahmed, Abu Daúd, Ibn Maya, Daracútni, Tajaui, Bazzár & Tabaráni en su Múyam al-Kabír en base a siete diferentes Compañeros. Consúltelo también en este libro la sección de Rukú respecto al diker.
246 Consúltelo también en este libro la sección de Rukú respecto al diker.
247 Sajíj, transmitido por Abu Daúd, Daracútni, Ahmed, Tabaráni & Baijáqui.
248 Muslim & Abu ‘Auána.
249 Bujari & Muslim.
250 Muslim, Abu Áuana, Tajaui & Daracútni.
251 Muslim y Abu ‘Auána.
Ante Ti prosterno mi persona y mi sombra; creo en Ti con todo mi corazón; reconozco tus favores hacia mí; he aquí mis manos y lo que he obtenido contra mi (deseo).252
8.- Subjána dí al yabarút ual malacút ual quibría-i ual ‘adámah.
Alabado quien posee el Poder, el Reino, la Magnificencia y la Supremacía, la cual repetía en la oración de la noche, al igual que las siguientes:
9.- Subjánaka [Alájuma] ua bijámdik, ua la ilája íla ant.
Alabado y exaltado Seas [ ¡Oh Alá!], y no hay más dios sino Tú.253
10.- Alájuma igfir lí ma asrart, u ama ‘alánt.
¡Oh Alá! Perdona lo que he ocultado (los pecados) y lo que he mostrado (los pecados)254
11.- Alájuma ich-al fi calbi núran, ua fi lisáni núran, ua ichal fi samí núran, ua ich-al fi bassarí núran, ua ich-al min tajtI núran, ua ich-al min fauquí núran, ua ‘an yamíni núran, ua ‘an yasaarí núran, ua ich-al amamí núran, ua ich-al jalfi núran, ua ich-al fi nafsí núran, ua ídam lí núran.
¡Oh Alá! ilumina mi corazón, mi (forma de) hablar; ilumina lo que escucho; ilumina por encima y debajo mío; a mi derecha y a mi izquierda; ilumina (mi camino), atrás y adelante, ¡ilumíname con Tu luz grandiosa!
12.- [Alájuma][Inní] aúdu biridáka min sajáttik, ua [aúdu] bimú-afátika min ‘ucubatik, ua aúdu bika mink, la ajssí zna-an aléik, anta cama aznaita ála nafsik.
[¡Oh Alá!][En verdad] busco refugio en la complacencia de Tu ira; [busco refugio] en el perdón de Tu castigo; busco refugio en Ti de Ti. sin llevar la cuenta de mis alabanzas a Ti. Nadie para alabarte como lo haces Tú.
PROHIBICIÓN DE RECITAR EL CORÁN EN SUYÚD
252 Ibn Násser, Bazzar y Hakim, quienes lo declararon sajíj pero Dájabi no, pero tiene bastante fundamento por una versión manuscrita mencionada.
253 Muslim, Abu ‘Auána, Nasái e Ibn Násser.
254 Ibn Abi Cheiba (62/112/1) & Nasái; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi también.
El Profeta acostumbraba prohibir la recitación del Corán en rukú y en suyúd, y ordenó en lo posible que dijeran súplicas en dicha posición, como explicamos en el capítulo del “Rukú”. También acostumbraba decir: el siervo esta lo más cercano a su Señor cuando se prosterna, así que incrementa sus súplicas.255
ALARGANDO LA SACHDA.
Muhámmad (Salallahu alehi wa salam) hacía su suyúd tan largo como su rukú, y algunas veces lo hacía extremadamente largo debido a ciertas circunstancias, como uno de los Compañeros narró:
“El mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) vino hacia nosotros para una de las dos últimas oraciones (dohor y Ázar) junto con Hassán o Hussein. El Profeta (Salallahu alehi wa salam) entonces, se puso al frente y lo colocó abajo (al lado de su pie derecho), dijo el takbír para la oración y comenzó a rezar. Durante la oración, el realizó una prosternación prolongada, así que levanté la cabeza (por encima de los demás asistentes) y ahí estaba el niño, sobre la espalda del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam), quien estaba en prosternación. Entonces regresé a mi posición (prosternado). Cuando el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) había terminado la oración, la gente dijo: ‘¡Oh Mensajero de Alá! A la mitad de la oración, haz realizado una postración muy larga, y tanto, que pensamos que sucedió algo o recibiste una revelación!’ A lo que contestó: Nada de eso; sucedió que mi hijo se montó a mi espalda, de modo que no quise apresurarlo sino hasta que cumplió se deseo”.
En otro hadiz: “Él (Salallahu alehi wa salam) estaba rezando. Cuando llegó a la sachda, al-Hassán y al-Hussein brincaron a su espalda. Cuando la gente trató de detenerlos, les hizo una cara para que los dejaran en paz. Tras completar la oración, los colocó en su regazo y dijo: Cualquiera que me ame, deberá amar a estos dos.”256
LA EXCELENCIA DE LA SACHDA
255 Muslim, Abu ‘Auána y Baijáqui. Se puede leer en Irwá (456)
256 Ibn Juzaima en su obra “Sajíj”, con un isnád jásan de Ibn Masúd (887) y Baijáqui en la forma mursal. Ibn Juzaima lo establece así: “Capítulo: evidencia de gesticulación que se sobreentiende no invalida ni merma a la oración”- ¡esta acción es una de las cuales la gente de la Opinión (los Críticos) han prohibido! Al respecto, hay otros hadices en Bujari, Muslim y otros.
Él (Salallahu alehi wa salam) acostumbraba decir: no habrá nadie entre mi umma que yo no conozca en el Día de la Resurrección. Y dijeron: ‘¿cómo los reconocerás, Oh Mensajero de Alá, de entre la multitud de seres de la creación?’ A lo que respondió:¿Acaso no hay entre vosotros alguno que entre a una cerca en la que se encuentran un negro corcel y un caballo con blancas patas y frente blanca?257¿Acaso no reconoceríais al segundo del primero? Ellos respondieron “por supuesto”. Y les dijo: Pues así, mi umma ese día poseerá rostros blancos258por el suyud, y pies y brazos259 por la ablución.260
También solía decir,: cuando Alá tiene misericordia sobre quienes quiere de la gente del fuego, Él ordena a los ángeles sacar a quienes hayan adorado a Alá; y ellos lo harán, reconociéndolos por sus marcas de suyud, porque Alá ha prohibido que el fuego devore a los marcados por el suyud. Así ellos serán alejados del fuego, porque el fuego devora a todos los hijos de Adán, excepto los que tienen la marca del suyúd.261
LA SACHDA SOBRE EL SUELO Y SOBRE ESTERAS262
Él se postraba a menudo sobre el suelo (llano).263
"Sus Compañeros oraban con él en el intenso calor, y cuando uno de ellos no podía apretar su frente contra la tierra, él extendía su túnica para (que pudieran) postrarse sobre ella".264
Él también decía: la tierra entera ha sido hecha un lugar de culto (mezquita) y una purificación para mi (persona) y la umma; así dondequiera que la oración llegue debido a alguien de mi umma, esta persona tiene su lugar de culto (mezquita) y su purificación a su lado. Aquéllos antes de mí pensaban que esto era demasiado; de hecho, ellos sólo oraban en sus iglesias y sinagogas.265
A veces, él se postraba en el lodo, y eso le pasó una vez al alba en la vigésima primera noche de ramadán, cuando llovió y el tejado de la mezquita que estaba hecha de palmeras, se deslavó. Así él (Salallahu alehi wa salam) se
257 La blancura se refiere a la parte del caballo donde las cadenas y argollas se colocan, incluyendo lo más abajo de las patas sin incluir las rodillas.
258 O sea, brillarán debido a la luz del suyúd.
259 Las partes que abarca la ablución: el rostro, manos y pies. Las marcas deslumbrantes de la ablución de la cara, manos y piernas de las personas son comparadas con la blancura del rostro del caballo y las patas.
260 Ahmed, con isnad sajíj. Tirmídi relato parte de ello y lo declaró sajíj. Se encuentra en Silisíla al-Ajadiz a-Sajíj.
261 Bujari & Muslim; el hadiz muestra que los pecaminosos de entre los que hacen la oración regularmente, no permanecerán en el fuego permanentemente, y esto es verdad- véase a-Sajíj (2054).
262 Estera: f. Tejido de esparto, juncos, palmas, etc., con que se cubre el suelo de las habitaciones (Ar. Jasír)
263 Esto es porque la mezquita no se cubría con esteras u otro tipo de cubierta. Esto es evidente en muchos hadices, tal como se verá en el siguiente y otro de Abu Sa’id.
264 Muslim & Abu ‘Auána.
265 Ahmed, Sirách & Baijáqui, con un isnád sajíj.
postró sobre el lodo; Abu Sa'id al-Judri dijo, "Así lo vi, con mis propios ojos, al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam), con rastros de lodo en su frente y nariz".266
También, "él a veces oraba en una al-jumra"267, o "en una estera"268a veces, y "él oró una vez sobre ella cuando se había teñido de negro debido al uso prolongado”.269
LEVANTÁNDOSE DE LA SACHDA
Luego: "él (Salallahu alehi wa salam) levantaba su cabeza de la postración mientras decía el takbír"270, y ordenó "al que rezaba deplorablemente" hacerlo, diciendo: la oración de cualquier persona no está completa hasta... postrarse (y) hasta que sus miembros estén en reposo, y diga, 'Alá es el más Grande' y eleve su cabeza hasta que se sienta derecho.271 También: “él levantaría sus manos con este takbír” algunas veces.272
SENTARSE EN MUFTARISHAN ENTRE LAS DOS SACHDAS.
Luego, "él ponía su pie izquierdo a lo largo del suelo y se sentaba en él [relajado] "273, y él ordenó "al que rezaba deplorablemente" (hacerlo) así, diciéndole: Cuando os postráis, postraos firmemente, y cuando os incorporéis, sentaos sobre vuestro muslo izquierdo.274
"Él tendría su pie derecho verticalmente "275, y "pondría sus dedos del pie hacia la quibla". 276[Vea el diagrama]
‘IC-Á ENTRE LAS DOS SACHDAS.
266 Bujari y Muslim.
267 Ibid.
268 Ibid.
269 Muslim & Abu ‘Auána.
270 Bujari & Muslim.
271 Abu Daúd & Hakim, que lo declararon Sajíj y Dájabi concordó.
272 Bujari en su Yuz’ Raf’ al-Yadain, Abu Daud con isnaad sajíj, Muslim y Abu ‘Auána. Esta dado en el Irwá (316).
Al elevar las manos aquí, y en cada takbír, tanto anunciado por Ahmed como en el Badaaí (3/89) de Ibn al Cayyim: “Azram lo citó de él (Imám Ahmed) al ser cuestionado sobre la elevación de las manos, a lo que dijo: ‘con cada movimiento hacia arriba y hacia abajo’. Azram dijo: vi a Abdulá (o sea, Imám Ahmed) elevar sus manos en la oración con cada movimiento hacia arriba y hacia abajo”.
273 Ahmed & Abu Daud, con isnád bueno.
274 Bujari & Baijáqui.
275 Nasái con isnád sajíj.
276 Muslim, Abu ‘Auána, Abu Sheik en Maa Rauaju Abu az-Zubair ‘an Gair Yaabir (Nos. 104-6) & Baijáqui.
“Él algunas veces practicaba ‘ic-á (descansando sobre ambos talones y (sobre) sus dedos del pie)”277
LA OBLIGACIÓN DE ESTAR EN REPOSO ENTRE LAS DOS SÁCHDAS.
“Él (Salallahu alehi wa salam) no reposaba hasta que cada hueso regresaba a su posición (apropiada)”278, y él ordenó “a quien rezaba deplorablemente” hacerlo del mismo modo, y le dijo: la oración de cualquiera de vosotros no esta completa hasta que la realiza así.279
OBLIGACIÓN DE ESTAR CÓMODOS ENTRE LAS DOS SÁCHDAS
"Él (Salallahu alehi wa salam) se ponía cómodo hasta que cada hueso recuperaba su posición (apropiada)280”; y ordenó a " quien rezaba deplorablemente" hacer lo mismo diciéndole que la oración de cualquiera de vosotros no esta completa hasta hacerla así281
DEMORANDO LA POSICIÓN DE SENTADO ENTRE LAS DOS SÁCHDAS
“Alargaba (la posición sentada) tanto que hasta casi era igual de larga como su sáchda"282 . En otras ocasiones “permanecía (en tal posición) que uno llegaba a decir que él (Salallahu alehi wa salam) ha olvidado”.283
LOS DIKERS ENTRE LAS DOS SÁCHDAS
Al sentarse, él (Salallahu alehi wa salam) decía:
1.
277 Ibid. Ibn al-Cayyim revisó tal cosa, tras mencionarse el iftirásh del Profeta entre las dos sáchdas, aquél dijo: “Ninguna otra manera de sentarse así de él se registra” Pero cuán correcto puede ser, si el ic-á nos ha llegado por vía del hadiz de Ibn Abbas en Muslim, Abu Daud y Tirmídi, quienes lo declararon sajíj, con otros(véase Silsila al-Ajadiz a-Sajíja 383); el hadiz de Ibn Omar con un isnád jásan en Baijáqui, fue declarado sajíj por Ibn Hayar. También, Abu Isaac al- Harbi lo cuenta en Garib al-Hadiz (5/12/1) de Táwus, quien vio a Ibn Omar e Ibn Abbás practicar el ‘ic-á; sus isnades son sajíj. Tenga Alá misericordia del Imám Malik, quien dijo: “cada uno de nosotros puede refutar y ser refutado, excepto el que ya ocupa una tumba”, y señaló la tumba del Profeta. Esta sunna fue practicada por muchos Compañeros, Sucesores y otros, y esto yo lo he extendido en mi obra al-Asl.
278 Abu Daúd y Baijáqui con isnád sajíj.
279 Abu Daud & Hakim, quien lo declaró sajíj y Dájabi estuvo de acuerdo.
280 Abu Daud y Baijáqui, con isnád sajíj.
281 Abu Daud y Hakim, declaráronlo sajíj y Dájabi concordó.
282 Bujari & Muslim.
283 Ibid. Ibn al-Cayyim dijo: “esta sunna la abandonó la gente después del tiempo de los Compañeros. Pero para quien se atiene a la sunna, y no mira a los lados con lo que la contradiga, que se despreocupe de lo que se opone a la guía (recta)”.
¡Oh Alá! (en otra narración: ¡Oh Señor mío!) Perdóname; ten piedad de mí; [fortaléceme;] [elévame;] guíame; [dispénsame;] dame sustento.284
Otras veces decía:
2.
¡Oh Señor mío! Perdóname, perdóname.285
Los dos recordatorios (dikers) previos también los decía en la oración de la noche.286
LA SEGUNDA SÁCHDA.
Después “él decía takbír y se postraba por segunda vez” 287 Ordenó también a "quien rezaba deplorablemente" hacerlo así; diciéndole después de haberle dado la orden de estar cómodo entre las sáchdas: entonces di 'Alá es el más Grande' y prostérnate hasta que tus uniones estén tranquilas [y hazlo así en todas tus oraciones].288 Él realizaba esta sáchda exactamente como
284 Abu Daud, Tirmídi, Ibn Maya & Hakim, declaráronlo sajíj y Dájabi concordó.
285 Ibn Maya con un isnad jásan. Imám Ahmed solía suplicar con esta dúa; Isaac bin Rajáuai dijo: “aquél que lo desee, puede decirlo 3 veces, o decir ‘¡Oh Alá! Perdóname…’ ya que ambos (recordatorios) han sido reportados del Profeta (Salallahu alehi wa salam) entre las dos sáchdas” (Masaíl del Imám Ahmed & Isaac Rajauai tal como lo contó Isaac al-Marwazi, p. 19)
286 Esto no niega la validez de las expresiones en las oraciones obligatorias debido a la ausencia de algo que diferencie entre aquello y las oraciones voluntarias. Este es el punto de vista de Chafeí, Ahmed & Isaac, sostuvieron que esto era permitido tanto en las oraciones obligatorias como las voluntarias, ya que Tirmídi lo ha narrado. Imám Tajáui lo apunta en Mushkil al- Aazaar (problemas con la tradición). El análisis apropiado apoya este argumento, porque no hay un punto de vista en la oración donde un recordatorio no sea válido, y por lo tanto apropiado como es en este caso.
287 Bujarí y Muslim.
288 Abu Daud y Hakim, declaráronlo sajíj, y Dájabi concordó; lo adicional es de Bujari y Muslim.
realizaba la primera. Además, “él elevaba sus manos con dicho takbír” algunas veces.289
Después, "él elevaba su cabeza mientras decía el takbír"290, y le ordenó a "quien rezaba deplorablemente” hacer lo mismo, diciéndole después de haberle ordenado como prosternarse la segunda vez: "entonces levanta tu cabeza y di takbír"291. Y agregó "[entonces hazlo así en todas tus prostraciones y reverencias,] ya que si lo haces, tu oración estará completa, y (algo) menos que esto, tú oración estará incompleta"292 En conjunto, "elevaba sus manos"293 algunas veces con dicho takbír.
SENTADOS EN DESCANSO
Posteriormente, "él se sentaba verticalmente [sobre su pie izquierdo, erecto, hasta que cada hueso ocupaba su posición respectiva]."294
APOYARSE FIRMEMENTE CON LAS MANOS AL LEVANTARSE PARA LA SIGUIENTE RAKÁ
Después, "se levantaba para la segunda raká, apoyándose sobre el suelo."295 O "él (Salallahu alehi wa salam) cerraba sus puños296 en la oración: apoyándose con sus manos cuando se incorporaba."297
289 Abu ‘Auána y Abu Daud con dos isnades sajíj. Ahmed, Malik y Chafeí apoyan el elevar las manos en sus propias narraciones. Ver nota previa en suyúd.
290 Bujarí y Muslim.
291 Abu Daud y Hakim declaráronlo sajíj; Dájabi concordó.
292 Ahmed y Tirmídi declaráronlo sajíj.
293 Véase pie de nota #10
294 Bujarí y Abu Daud. Esta manera de sentarse es conocida por los sabios de Fiq como yálsa al-istirája (sentada de descanso). Chafeí lo confirma, al igual que Ahmed en su Tajquíc (111/1) quien además lo defendió firmemente, ya que era bien sabido que él instigaba mucho en seguir una sunna en la que no había nada de contradictorio. Ibn Jáni escibió en su Masaail acerca de Imám Ahmed (p.42): “Ví a Abu Abdulá (o sea, Imám Ahmed) algunas veces apoyarse sobres sus manos cuando se incorporaba para la siguiente raká, y algunas veces se sentaba erecto y se incorporaba (directamente)”. De Imám Isaac bin Rajáuai se dice que él dijo –anotado en el Masaail de Marwazi (1/147/2)-: “El ejemplo fue puesto por el Profeta (Salallahu alehi wa salam) al apoyarse con sus manos al levantarse, ya sea que estuviese viejo o jóven” véase también Irwá (2/82-3).
295 Bujarí y Chafeí.
296 En árabe dice “como uno que amasa con las manos”.
297Abu Isaac al-Harbi sin ningún sanad equivocado, y su significado se encuentra en Baijáqui, con un isnad sajíj. En cuanto al hadiz que dice: “solía levantarse como una flecha, sin apoyarse con las manos” es un hadiz inventado (maudú), y todas las narraciones del mismo corte os on muy débiles o también
LA SEGUNDA RAKÁ.
"Cuando él (Salallahu alehi wa salam) se levantaba para la segunda raká, comenzaba alabando a Alá (Fatiha 1:1), sin detenerse."298
Siempre realizaba esta raká exactamente igual a la primera, excepto que la hacía más corta que la primera como antes.
ES OBLIGATORIO REZAR SURA LA FATIHA EN CADA RAKÁ
Ordenó a " quien rezaba deplorablemente" recitar la Fatiha en cada raká; tras decírselo (recitarla en la primera raká)299, después le ordenó: Hazlo así en toda tu oración300 (en otra narración: en cada raká).301 También solía decir, a cada raká, su recitación.302
inventados. Esto lo explico en mi obra “Colección de hadices falsos” (Silsila al- Ahadiz a-Da’ífa; pp. 562, 929, 968)
298 Muslim y Abu ‘Auána. La falta de interrupción que afirma este hadiz no se refiere a la dada en la du’a de apertura, por lo cual no incluye la pausa para recitar la isti-áda, o puede tener un significado más amplio: lo primero es lo acertado. Hay dos puntos de vista entre los escolásticos del Islam con respecto a la isti-áda y sólo consideramos lo correcto concernientemente a lo dicho en cada raká; los detalles de todo esto lo encontrarán en al-Asl.
299Abu Daúd & Ahmed con isnád fuerte.
300 Bujarí & Muslim.
301 Ahmed, con isnád jásan.
302 Ibn Maya; en el Sajíj de Ibn Hibban; y por Ahmed , de la obra Masáil (1/52)de Ibn Jáni. Yabir bin Abdulá dijo: “Quien rece una raká en la que no recite la Madre del Corán, no ha rezado nada, a menos que este detrás den imám”- relatólo Malik en su Muwatta.
EL PRIMER TACHÁJUD.
Después, él (Salallahu alehi wa salam) se sentaba para el tachájud después de terminar la segunda raká. En la oración de dos rakás (el fáyer), "se sentaba en muftarishan"303, y ya que solía sentarse entre las dos sáchdas, "se sentaba de igual modo en el primer tacháhjud"304 en la oración de tres –y cuatro-rakás. [Véase diagrama].
Y ordenólo así a “quien rezaba deplorablemente”, diciéndole: cuando te sientes a mitad de la oración, estad calmado; tiende tu muslo izquierdo y realiza el tachájud.305
Abu Huraira narró: "Mi amigo (Salallahu alehi wa salam) me prohibió agazaparme (ic-á) como un perro"; en otro hadiz: "solía prohibir el agazapamiento del diablo."306
"Una vez sentado en tachájud, colocaba la palma derecha (de su mano) sobre su muslo derecho (en otra narración: rodilla); y la palma izquierda (de su mano) sobre su muslo izquierdo (en otra narración: rodilla, extendiéndola sobre la misma)"307; O "colocaba el extremo de su codo derecho sobre su muslo derecho."308
También se menciona que “prohibió a un hombre que estaba sentado en oración descansando (cómodamente) sobre su mano izquierda: en verdad que así rezan los judíos”309. De otra forma también dijo: No os sentéis así, porque en verdad esta es la forma de aquellos que se sientan y que serán del número de los castigados310. Otro hadiz reza que, es la posición de aquellos que incurren en la Ira (de Alá).311
MOVER EL DEDO EN TACHÁJUD
"Él (Salallahu alehi wa salam) extendía la palma izquierda (de su mano) sobre su rodilla izquierda, cerraba el puño derecho de su mano derecha, apuntando
303 Nasái (1/173) con isnad sajíj.
304 Bujarí y Abu Daúd.
305 Abu Daud y Baijáqui, con isnád jásan.
306 Tayálasi, Ahmed e Ibn Abi Cheiba. Sobre el ic-á, Abu Ubeida y otros dijeron “que cuando un hombre presiona sus posaderas contra el suelo, mantiene sus canillas rectas, y apoya sus manos sobre el suelo, lo hace igual que un perro.” Esto es diferente al ic-a entre sáchdas, lo que sí esta aprobado en la sunna, como se hablo en la sección ic-á.
307 Muslim, Abu ‘Auána y otros. Se encuentra en el Iruá (316).
308 Muslim y Abu ‘Auána.
309 Baijáqui y Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó. El siguiente es semejante a éste; ambos se encuentran en Irwá (380).
310 Ahmed y Abu Daud, con isnád sajíj
311. Abdu Razác; Abdúl Jác lo declaró sajíj en su Ahkam (no. 1284-con mi propia corroboración).
con el dedo adyacente al pulgar en dirección de la quibla, y fijaba su mirada sobre éste. (o sea, el dedo índice)."312
Por otro lado, "cuando apuntaba con su dedo, colocaba su pulgar sobre el dedo medio"313; y en ocasiones “él formaba un círculo con estos dos (dedos)."314
"Cuando alzaba su dedo, lo movía y suplicaba con él"315, También solía decir que "es mucho más poderoso que el acero contra el diablo, refiriéndose al dedo índice."316
Inclusive, "los Compañeros del Profeta (Salallahu alehi wa salam) solían recordarse unos a otros que (debían) apuntar con el dedo cuando suplicasen."317
312 Muslim y Abu ‘Auána e Ibn Juzaima, Humeidi (13/1) y Abu Ya’la (275/2) adscribieron un isnád sajíj en base a lo que dijo Ibn Omar: “y esto es un tiro hacia el Diablo; nadie olvida esto cuando lo hace”, y Humeidi alzó su dedo. Humeidi dijo también que Muslim bin Abi Mariam dijo: “un hombre me contó que en una iglesia de Siria observó imágenes de profetas pintados como éste”, y Humeidi alzó su dedo. Esto es una anécdota bastante extraña, pero el isnád que se recorre hasta dicho “hombre” es correcto.
313 Muslim y Abu ‘Auána e Ibn Juzaima, Humeidi (13/1) y Abu Ya’la (275/2) adscribieron un isnád sajíj en base a lo que dijo Ibn Omar: “y esto es un tiro hacia el Diablo; nadie olvida esto cuando lo hace”, y Humeidi alzó su dedo. Humeidi dijo también que Muslim bin Abi Mariam dijo: “un hombre me contó que en una iglesia de Siria observó imágenes de profetas pintados como éste”, y Humeidi alzó su dedo. Esto es una anécdota bastante extraña, pero el isnád que se recorre hasta dicho “hombre” es correcto.
314Muslim y Abu ‘Auána .
315 Abu Daud, Nasái, Ibn al-Yarúd en al-Muntacá (208); Ibn Juzaima (1/86/1-2) e Ibn Hibban en su Sajíj (485) con un isnád sajíj. Ibn al-Mulaquin también lo declaró sajíj (28/2), y tiene un narrador confiable en la persona de Ibn ‘Adi (287/1).
316 Ibíd. Sobre las palabras “suplicaba con él”, el Imám Tajáui dijo: “Esto es evidencia de que lo hacía hasta al final de la oración”. De aquí se constata que la sunna es apuntar y mover el dedo continuamente hasta el taslím, por lo que la súplica termina ahí. Esta es la posición de Malik y otros. Imám Ahmed fue cuestionado: “¿Debe un hombre apuntar con su dedo durante la oración?” A lo que respondió firmemente que “Sí”. (mencionado por Ibn Jáni en su obra Masaail del Imám Ahmed, 1/80). De aquí, es claro que mover el dedo en tachájud es una sunna comprobada del Profeta (Salallahu alehi wa salam), la cual practicaba Ahmed y otros imames de la sunna. Por lo tanto, los que piensan que no tiene sentido y es irrelevante y no tiene que ver nada con la oración, deben temer a Alá, y por lo mismo no mueven sus dedos aún sabiendo que es una sunna establecida. Y tienen una falta de entendimiento para interpretarlo (porque son unos necios), lo que es inconsistente con el modo árabe de expresión y contrario al entendimiento de los imames con respecto a eso.
Lo sorprendente es que algunos de ellos defienden a los imames en otros asuntos que, aunque contradigan claramente la sunna, con el argumento de que el señalar los errores de los imames implica faltarle al respeto y vilipendiarlos. Sin embargo, caen en contradicción porque a la vez que rechazan las sunnas poco o nada conocidas del Profeta, comienzan a mofarse de aquellos que las practican. Sea que lo hagan conciente o inconcientemente, sus burlas también “se llevan entre las patas” tanto a los imames a quienes a menudo defienden estúpidamente y los que practican las sunnas correctas: todo al mismo tiempo. Pero en realidad a quien realmente están denigrando es al Profeta (Salallahu alehi wa salam) mismo, porque él es quien verdaderamente nos trajo la Sunna, por lo que hacer escarnio de esto equivales a denigrarse uno mismo.
<<Más cuál es la recompensa de aquellos de entre vosotros que se comporta así excepto…>>
En cuanto a descansar el dedo después de apuntar o dejar de moverlo tras la afirmación: lá ilája … (no hay Dios…); con la negación: … íla lá (excepto Alá), no tiene fundamento en la sunna. En realidad, es contrario a la sunna dejar de moverlos, como lo prueban los hadices.
Más aún, el hadiz que menciona no mover su dedo no tiene un isnád auténtico, como he explicado en Daíf Abi Daúd (175). Y aún si esto fuese cierto, es negante, ya que el hadiz precedente es afirmativo: lo afirmativo precede a lo negante, como bien saben los ulemas.
Una vez "vio a un hombre suplicar con los dos dedos, así que dijo: hacedlo uno, [con uno]" y lo indicó señalando el dedo índice (de su mano)."318
"Él (Salallahu alehi wa salam) hacía esto en ambos tachájud."319
ES OBLIGATORIO EL PRIMER TACHÁJUD Y SUPLICAR DURANTE EL MISMO
"Él (Salallahu alehi wa salam) recitaba la Tajiya después de cada dos rakás"320; "la primer cosa que decía al estar sentado era: toda la honra y respeto a Alá."321
"Cuando (una vez) olvidó realizar el tachájud después de las dos primeras rakás, él se postraba (dos veces) por (dicho) olvido."322
Él solía ordenarles realizar el tachájud, diciendo: Cuando os sentéis después de cada dos rakás, decid: ‘toda la honra…’ y luego cada uno de vosotros deberá decir la súplica que más le agrade y suplicad a Alá, el Poderoso y Sublime [con ella]323. En otra versión: Decid “toda la honra y ... en cada sentada324, y también ordenó a "quien rezaba deplorablemente” hacerlo así, como se mencionó previamente.
"Él (Salallahu alehi wa salam) les enseñaba el tachájud del mismo modo que les enseñó las suras del Corán"325, y "la sunna es decirlo calladamente."326
EL MODO DE HACER TACHÁJUD
El Profeta enseñó distintas maneras de pronunciar el tachájud:
317 Ahmed, Bazar, Abu Yapar al-Bujtirí en al-Amaali (60/1), Abdúl Gani al-Macdisí es su Sunan (12/2) con el isnad sajíj, Ruyáni es su Musnad (249/2) y Baijáqui.
318 Ibn Abi Cheiba (2/123/2) con isnád jásan.
319 Ibn Abi Cheiba (12/40/1;2/123/2) y Nasái. Hakim declarólo sajíj y Dájabi concordó, y hay la narración que apoya a Ibn Abi Cheiba.
320 Nasái & Baijáqui, con isnád sajíj.
321 Muslim y Abu ‘Auána.
322 Baijáqui lo transmitió como una narración de Aixa con isnád sajíj, corroborado por Ibn al-Mulaquin (28/2).
323 Nasái, Ahmed & Tabaráni en Múyam al Kabír (3/25/1) con un isnád sajíj. El significado literal del hadiz es evidencia para la validez de suplicar en cada tachájud, incluyendo el que no esta próximo al taslím, y es el punto de vista de Ibn Hazm.
324 Nasái con isnád sajíj
325Bujari & Muslim.
326Abu Daud & Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
48 Del ár. Tajiyát, o sea: “todas las palabras que implican paz, soberanía y eternidad, que son de Alá” (Nijáya).
49 Del ár. Salauát, o sea, “todas las súplicas que se usan para glorificar la majestad de Alá, porque Él tiene todo el derecho de ellas, y nadie más es merecedor de ellas excepto Él”. (Nijáya)
1.
Ibn Masúd, dijo: "El Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) me enseñó el tachájud (con) mi palma entre sus palmas y el modo que me enseñó las suras del Corán (fueron):
Las devociones327, los ruegos328 y halagos329 son para con Alá. La paz 330 sea contigo, ¡Oh Profeta!, junto con las bendiciones331 y misericordia de Alá. La paz sea con nosotros y para con los honestos siervos de Alá. [Al decir esto, esta incluyendo a los siervos justos en los cielos y en la tierra.] Testifico que no hay más dios que Alá; y testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero. [Y así fue mientras habitó entre nosotros; pero después que se fue, decíamos:
[la paz sea con el Profeta]."332
329 Del ár. Tayibát, o sea, “todas las palabras que son buenas y puras para la alabanza de Alá y no aquellas (que ofenden y ) que no comparten los atributos con los cuales reyes (y dignatarios) merecen.” (Fath al-Bári)
330 Significa buscar refugio en Alá y sentirse fuerte por Él; ya que as-salaam (paz) es uno de los nombres de Alá. De aquí, que los saludos efectivamente signifiquen: Alá es un guardián y salvaguardador de ti. Igualmente se dice que “Alá esté contigo”, o sea, que te salvaguarde, te ayude y te favorezca.
331 Un término que significa todo lo bueno continuamente dimana de Alá.
332 Bujarí, Muslim, Ibn Abi Cheiba (1/90/2), Sirách & Abu Ya’la en su Musnad (258/2). Lo pueden encontrar en Irwá (321).
Dijo Ibn Masúd : “Dijimos: Paz sea con el Profeta”, y aclara que los Compañeros solían decir “Paz sea contigo, ¡Oh Profeta!” en el tachájud mientras el Profeta (Salallahu alehi wa salam) estaba vivo; pero cuando murió, dejaron de hacerlo, y en su lugar decían “la paz sea con el Profeta”. Indudablemente esto fue hecho con el permiso del Profeta (Salallahu alehi wa salam), lo que apoya firmemente Aixa de igual modo enseñaba el tachájud en la oración con “paz sea con el Profeta”, como lo transmitió Sirách en su Musnad (9/1/2) & Mujáis en al-Faua’id (11/54/1) con dos isnádes sajij de Aixa.
Ibn Hacher dice: “esta añadidura demuestra claramente que ellos solían decir ‘la paz sea contigo, Oh Profeta’, dirigiéndose directamente a él mientras vivía, pero cuando él (Salallahu alehi wa salam) murió, dejaron de dirigirse a él directamente y en su lugar lo mencionaban en tercera persona diciendo ‘la paz sea con el Profeta’.” También dice más adelante: “Subki dijo en Shar al-Minjach, después de contar la narración de Abu ‘Auána, solamente ‘si esto es contado autenticamente por los los Compañeros, prueba que después de su tiempo, no es obligatorio dirigirse al Profeta (Salallahu alehi wa salam) directamente
2.
El tachájud de Ibn Abbás: "El Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) solía enseñarnos el tachájud de la manera que nos enseñó [las suras del] el Corán; y solía decir:
Las devociones, halagos, ruegos y cumplidos son para con Alá. La paz sea contigo ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá y Sus bendiciones. La paz sea con nosotros y con los siervos honestos de Alá. Testifico que no hay más dios que Alá; y [Testifico] que Mohámed es el Mensajero de Alá (en otra narración: ... es Su siervo y mensajero)."333
3.
El tachájud de Ibn Omar, quien reportó que el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) decía en el tachájud:
Las devociones, oraciones y halagos son para con Alá. La paz sea contigo, ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá - Ibn Omar
en las zalemas, así que uno dice ‘la paz sea con el Profeta’. (Ibn Hayar continúa:) Ésto es auténtico sin duda (porque esta asentado en Sajíj Bujari), y también he hallado fuerte apoyo a esto: - Abdú Razác dijo; Yureich me informó: Ata me informó que los Compañeros solían decir ‘la paz sea contigo ¡Oh Profeta!’ mientras éste esta vivo, pero después que murió, decían ‘la paz sea con el Profeta’ y esto es un isnád sajíj. En cuanto a la narración de Saíd bin Manssur de Obeida bin Abdulá bin Masúd, quien lo dijo de su padre que, el Profeta (Salallahu alehi wa salam) les enseñó el tachájud, y que él (Abdulá bin Masúd) lo dijo (el tachájud); Ibn Abbás dijo: ‘solíamos decir ‘la paz sea contigo ¡Oh Profeta!’ sólo mientra estaba vivo; a lo que Ibn Masúd respondió: ‘Es así como fuimos instruidos, y es así como lo enseñamos’, parece ser que Ibn Abbas lo señaló como un asunto polémico pero Ibn Masúd no lo aceptó. Sin embargo, la narración de Abu Ma’mar (de la narración de Bujari) es más auténtica, ya que Abu Obeida no escuchó (los hadices) de su padre, sino que, el isnád que llega hasta Abu Obeida es inconsistente.” (fin de la cita de Ibn Hacher).
Las palabras de Ibn Hayar han sido registradas por muchos sabios en sus análisis, o sea, Cataláni, Zarcáni, Lucnoui, etc. , quienes decidieron dar fe de sus palabras sin más comentarios. Dicha olémica se trata más a detalle en la obra al-Asl.
333 Muslim , Abu ‘Auána, Chafeí & Nasái.
dijo, "Y añado:"334 ... y Sus bendiciones. – La paz sea con nosotros y con los siervos justos de Alá. Testifico que no hay más dio que Alá - Ibn Omar dijo “Y añado:”335 ... exclusivamente Él sin que se lo asocie; - Testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero.336
4.
El tachájud de Abu Musa al-Ash'ari, quien dijo que el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) dijo: ... cuando os sentéis, la primer cosa que vosotros diréis será:
Las devociones, halagos y ruegos son para con Alá. La paz sea contigo ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá y Sus bendiciones. La paz sea con nosotros, y con los siervos justos de Alá. Testifico que no hay dios más que Alá [exclusivamente Él sin que se lo asocie]; y testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero – siete frases, y todas ellas son las salutaciones."337
5.
El tachájud de Omar ibn al-Jatab, quien enseñaba a la gente a decir el tachájud (del Profeta) cuando daba el sermón desde el mimbar, diciendo, “Decid:
Las devociones son para con Alá; los más puros elogios para con Alá; los halagos [son para con Alá]; los ruegos son para con Alá. La paz sea contigo, ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá y Sus bendiciones. La paz sea con nosotros y con los siervos justos de Alá. Testifico que no hay más dios que Alá; Testifico que no hay
334Véase la siguiente nota.
335 Éstas dos adiciones han sido verificadas como partes del tachájud del Profeta (Salallahu alehi wa salam). Ibn Omar no las añadió a su parecer (lejos de ello esta de tal aberración); en realidad las aprendió de otros Compañeros que las registraron del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y después él las añadió al tachájud que escuchó directamente del Profeta (Salallahu alehi wa salam).
336 Abu Daud & Daracútni, declarándolo sajíj.
337 Muslim, Abu ‘Auána, Abu Daud e Ibn Maya.
dios más que Alá y testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero.338