Algunas de las cualidades del Corán

1. ¿Por qué y cómo aprender el Corán? "Cuando les llegue de Mí una guía, quienes la sigan no habrán de sentir temor ni tristeza" (Corán 2:38). El Corán es la mayor bendición de Allah para usted. Es el cumplimiento de Su promesa a Adán y a sus descendientes. 

2. Es el único medio de dominar el miedo y la ansiedad. Es la única "luz" (nur), mientras andamos tanteando en las tinieblas, con la que podemos encontrar el camino hacia el éxito y la salvación. Es la única sanación (shifa') para las enfermedades del alma, así como para los males sociales que nos rodean. El Profeta Muhammad dijo,

"El Corán es un intercesor y su intercesión es aceptada y su alegato es creído. Quien lo siga, lo conduce al Paraíso; y quien lo coloque detrás de él será arrastrado al Fuego"[1].

3.    El Profeta Muhammad dijo: "Debes dedicarte al recuerdo de Allah y a la recitación de Su Libro, porque es luz para ti en la tierra y (un medio por el cual) serás mencionado en los Cielos"[2].

El Corán es un recordatorio constante de nuestra verdadera naturaleza y destino, de nuestra posición, nuestros deberes, nuestras recompensas, los peligros que existen. Más que nada, es la única manera de acercarse cada vez más a nuestra Creador. Nos habla de Él, de Sus atributos, de cómo gobierna sobre el cosmos y la historia, de cómo Se relaciona con nosotros, y de cómo debemos relacionarnos con Él, cómo relacionarse con uno mismo, con nuestros semejantes y con otras criaturas.

Las recompensas que nos esperan aquí son seguramente muchas, y en el Más Allá se incrementarán; pero lo que nos espera al final del camino, lo promete Allah en el hadiz qudsi: 

"Lo que ningún ojo ha visto, ningún oído lo ha escuchado, y ningún corazón ha concebido jamás".  Abu Hurairah añadió: "Lean si quieren: 'Nadie sabe la alegría que les espera [a los creyentes] como recompensa por sus obras'" (Corán 32:17)[3].

El Corán sigue tan vigente hoy como cuando fue revelado

La guía del Corán, por su propia afirmación, tiene una relevancia eterna para todas las personas, ya que es la palabra del Dios Eterno. El Corán, la guía eterna del Dios Viviente, es tan vigente para nosotros hoy como lo era hace 14 siglos, y seguirá siéndolo para siempre. La palabra del Dios Viviente ha sido enviada para guiar a los seres humanos en todos los tiempos venideros.

Para que esta afirmación sea confirmada, debe ser posible para nosotros recibir, experimentar y entender el Corán como lo hicieron sus primeros destinatarios, al menos hasta cierto punto. En otras palabras, a pesar de la trascendencia histórica de la revelación en un idioma en particular y en un momento y lugar en particular, debemos ser capaces de comprender el Corán ahora porque su mensaje es eterno. 

Para aquellos que lo escucharon por primera vez de los labios del Profeta, el Corán era una realidad viva. No tenían ninguna duda de que, a través de él, Allah les hablaba. Sus corazones y mentes fueron capturados por ello. Las lágrimas fluían de sus ojos y sus cuerpos temblaban. Lo encontraron profundamente importante para sus asuntos y experiencias, y lo integraron plenamente en sus vidas. Fueron completamente transformados por él. Como resultado, aquellos que pastoreaban ovejas y arreaban camellos se convirtieron en los líderes de la humanidad.

Hoy tenemos el mismo Corán con nosotros. Aunque hay millones de copias en circulación, debido a que ya no leemos el Corán como una realidad viviente, nuestros ojos permanecen secos, nuestros corazones permanecen inmóviles, nuestras mentes permanecen impasibles, y nuestras vidas permanecen inalterables. ¿Puede el Corán ser una fuerza viva, relevante y tan poderosa para nosotros hoy como lo era hace 1.400 años? Esta es la pregunta más crucial que debemos responder si queremos dar forma a nuestro destino de nuevo bajo la guía del Corán. 

¿Cómo lo hacemos? La respuesta es simple. Estudiando y aprendiendo el Corán entrando en el mundo del Corán considerando que Allah nos está hablando a través de él en este momento, y cumpliendo las condiciones necesarias para tal tarea. Solo centrando nuestras vidas en el Corán, los musulmanes encontraremos el significado de nuestra existencia o encontraremos dignidad en este mundo. Más importante aún, sin hacer énfasis en aprender el Corán, nunca complaceremos a nuestro Creador y Señor.

Hacer de su mensaje una parte real de nuestras vidas, como lo fue para los primeros creyentes y con la misma relevancia apremiante y profunda para todos nuestros asuntos y experiencias actuales.

Las bendiciones del Corán son ilimitadas, pero la medida de su obtención depende enteramente de la capacidad y la idoneidad de la recepción que usted le brinde. Por lo tanto, desde el principio, sea plenamente consciente de lo que el Corán significa para usted y lo que exige de usted.

En conclusión, cada musulmán tiene el deber de dedicarse a leer, comprender y memorizar el Corán. La próxima lección se centrará en cómo aprender el Corán.

La importancia de aprender el Corán según las palabras del Profeta Muhammad


1.    Why-&-How-to-Learn-the-Quran-Part-2.jpg"Los mejores de ustedes son los que aprenden el Corán y lo enseñan"[1].

2.    "Allah tiene su propia gente entre la humanidad". Dijeron: "Oh Mensajero de Allah, ¿quiénes son?". Él dijo: "La gente del Corán, la gente de Allah y los que están más cerca de Él"[2].

3.    "Ciertamente este Corán es un banquete de Allah. Aprendan, pues, lo que puedan de Su banquete. Este Corán es la cuerda de Allah, la luz clara, la cura [efectiva y benéfica], la inmunidad para quien se aferra a él, la salvación para el que lo sigue, no tiene torcedura que enderezar ni desvío que encarrilar. No se deshacen sus maravillas ni envejece por sus abundantes refutaciones. ¡Recítenlo, porque Allah los premiará por cada letra que reciten..." (También Abdullah Ibn Mas'ud dijo: "Este Corán es el banquete de Allah. Quien entre [participe de él] está a salvo")[3].

El Corán es un "banquete" en el sentido de que es algo de gran beneficio que Allah ha preparado para la gente y los ha invitado a él.

4.    "... No se ha reunido un grupo de gente en una de las casas de Allah (mezquitas) recitando el libro de Allah y estudiándolo, sin que haya descendido sobre ellos la tranquilidad, los haya envuelto la clemencia, los hayan rodeado los ángeles y los haya mencionado Allah entre los que están cerca de Él”[4].

5.    "Quien enseñe un versículo del Libro de Allah, será recompensado [cada vez que] sea recitado"[5].

Pautas prácticas para estudiar el Corán


¿Con qué frecuencia leer?

Todos los días usted debe leer algo del Corán. De hecho, no considere un día completo a menos que haya pasado algún tiempo con el Corán. Es mejor leer regularmente, aunque sea solo una pequeña parte, que leer partes largas, pero solo de vez en cuando.

¿Cuánto leer?

No hay una respuesta definitiva, varía de una persona a otra y de una situación a otra. La directriz es lo que Allah ha dicho: "Así que reciten durante la oración lo que sepan del Corán" (Corán 73:20).

La cantidad de lectura dependerá en gran medida del propósito de la lectura. Si usted solo quiere pasar tiempo con el Corán, o tener una visión general rápida, puede leer mucho más rápido y, por lo tanto, más. Si quiere meditar y reflexionar, puede leer mucho más despacio y, por lo tanto, menor cantidad.

¿Cuándo leer?

Cualquier momento del día o de la noche es adecuado para leer el Corán, y uno puede hacerlo en cualquier postura física. Allah dice,

"Y celebra el nombre de tu Señor por la mañana y por la tarde. Y por la noche prostérnate ante Él. Usa gran parte de la noche para glorificarlo" (Corán 76:25-26).

"Que invocan a Allah de pie, sentados o recostados" (Corán 3:191).

Hay algunos momentos específicos que son más deseables y de más recompensa, ya que son recomendados por Allah y Su Profeta. También hay ciertas posturas recomendadas. El momento más óptimo para leer es por la noche y la postura más deseable es estar de pie en oración. Para hacerlo, se requiere que memorice algunas porciones del Corán y que permanezca despierto por algún tiempo durante la noche. Usted puede no ser capaz de hacerlo todo el tiempo por varias razones y el Corán reconoce tales limitaciones, por lo tanto, se le permite cualquier porción en cualquier momento y cualquier posición.

Aprender a leer correctamente en árabe

Tomará algún tiempo y esfuerzo aprender la escritura árabe y aprender a leer el Corán correctamente. Es mejor aprender con un maestro calificado, pero si usted no tiene la oportunidad de hacerlo, puede aprender con cualquiera de los sitios web de aprendizaje en línea del Corán. Dedique media hora, tres a cinco días a la semana, durante aproximadamente un año y estará en buen camino para recitar el Corán en árabe.

Escuche atentamente

Si bien es posible que no pueda recitar el Corán inmediatamente, puede descargar archivos mp3 gratuitos y escucharlos en su smartphone u ordenador. Escuche atentamente y guarde silencio cuando se recita el Corán. Esto es lo que el mismo Corán ordena: "Cuando el Corán sea leído, escúchenlo con atención y guarden silencio para que se les tenga misericordia" (Corán 7:204).

No se debe hablar cuando el Corán es recitado.

Memorizar el Corán

Memorice todo lo que pueda del Corán. La memorización es una manera esencial de hacer que el Corán penetre en su alma. No es un acto mecánico, ritual; es un acto de alta importancia espiritual y devocional. Solo a través de la memorización se puede recitar el Corán en las oraciones y reflexionar sobre su significado mientras se está de pie en la presencia del Señor. Haga que el Corán fluya en su lengua, resida en su mente, habite en su corazón, se convierta en su compañero constante. La mejor manera de memorizar es con un maestro calificado, pero si no hay uno disponible, puede usar un maestro en línea. Será muy difícil hacerlo solo.

Servicios gratuitos


·       http://www.tvquran.com/en/

·       http://quranicaudio.com/

·       http://www.quranexplorer.com/Quran/Default.aspx

·       http://www.clearquran.com

·       http://www.quranful.com

·       Busca en iTunes o Google Play aplicaciones de recitación con la palabra clave "Corán" para su smartphone o tablet.