DESTACANDO A LAS COMPAÑERAS ENÉRGICAS DEL PROFETA 


Escrito por Theresa Corbin, traducido por Cinthia N. Mascarell

LAS MUJERES ALREDEDOR DEL PROFETA (PYB)


 


Para conocer a alguien, debes conocer a la gente cercana a él: aquellos que lo moldearon, le enseñaron, lo inspiraron, lo cuidaron.

De esta manera, para conocer al Profeta (PyB), debes saber quiénes eran las personas que lo rodeaban. Sin duda, él era sumamente influyente. Dio forma a la vida de sus compañeros de maneras increíbles. Su legado sigue dando forma a nuestras vidas hoy.

Pero como cualquier otro ser humano, también fue influenciado por otros. Afortunadamente, Allah (SWT) rodeó al Profeta Muhammad (PyB) con muchas personas increíbles, incluidas algunas mujeres muy fuertes. Aquí hay un breve vistazo a algunas de las grandes cualidades que estas mujeres poseían:

BARAKAH – LA MADRE


Barakah (que Allah esté complacido con su ella), era sirviente en la familia de Muhammad (PyB) desde mucho antes que Muhammad naciera. Ella se ocupó de los asuntos de su madre y padre con gran devoción y compromiso.

Una vez, Barakah (RA) narró que la madre de Muhammad (PyB), Aminah dijo:

«¡Oh Barakah! He visto un sueño extraño», «¿Algo bueno, mi señora?», le pregunté.

[Aminah dijo]: «Vi luces provenientes de mi abdomen que iluminaban las montañas, las colinas y los valles alrededor de la Meca».

«¿Se siente embarazada, mi señora?»

«Sí, Barakah», respondió ella. «¡Pero no siento ninguna molestia como sienten otras mujeres!»

«Dará a luz a un niño bendecido que traerá bondad», le dije.

Cuando Aminah dio a luz a Muhammad (PyB), Barakah (RA) fue la primera persona en sostenerlo. Al principio de la infancia de Muhammad, Aminah, durante un viaje, se enfermó gravemente y falleció. Barakah se convirtió en una madre para el niño huérfano cuando estaba al cuidado de su abuelo y luego de su tío.

Ella continuó cuidando a Muhammad hasta la edad adulta como una madre cuidaría a su propio hijo. Ella se quedó con el Mensajero de Allah (PyB) incluso después de su matrimonio con Khadijah (RA).

Y cuando el mensaje de Allah llegó a Muhammad, Barakah fue una de las primeras personas en aceptar el Islam. Barakah era cálida, protectora y cariñosa y se convirtió en una segunda madre para el Profeta (PyB) que quedó huérfano tan joven. La llamó «ummi», que significa madre en árabe. [i]

RUFAYDAH- LA DOCTORA


Durante la batalla de la Trinchera, Mu’adh (RA) sufrió una lesión grave por la cual buscó tratamiento médico. Es en este caso que nos encontramos por primera vez con el nombre de Rufaydah, sus habilidades médicas y su clínica, que era una simple carpa llamada «la carpa de Rufaydah».

Rufaydah se volvió muy hábil en la curación de huesos rotos, heridas de guerra, etc. por experiencia. Ella era entusiasta, compasiva e ingeniosa. Se decía que buscaba cualquier medio disponible para tratar a los que estaban a su cargo.

Sorprendentemente, nunca pidió un pago por el tratamiento que dio, sino que gastó de su propio dinero para las necesidades de sus pacientes. [ii]

AL-KHANSA – LA POETIZA


Al-Khansa (RA) fue un verdadera artista que vio la belleza en el lenguaje. Comenzó a elaborar poemas a una edad temprana, pero era tímida y nunca produjo más que unas pocas líneas. Eso fue hasta que ella se dedicó a su arte cuando se enfrentó a la pérdida de su hermano.

En su dolor, refinó su talento y produjo versos sofisticados y generosos. Ella alcanzó fama por su habilidad en el lenguaje.

Al-Khansa (RA) abrazó el Islam en Medina y prometió su lealtad al Profeta (PyB). El Mensajero de Allah una vez la escuchó recitar poesía y le pidió que continuara. El Profeta la animó en su arte y le encantaba escucharla recitar. [iii]

KHAWLA- LA FEMINISTA


Se narra que el esposo de Khawla, mientras discutía con ella, declaró que ella era como la espalda de su madre para él. Una expresión de los árabes en ese momento, que significa que estaba divorciado de ella. Quedó muy herida por esto.

Cuando su esposo se calmó, él regresó a ella para tener relaciones íntimas. Ella se negó ya que él le había dicho que ya no era como una esposa para él.

Es más, ella llevó su caso al Profeta (PyB), sabiendo que esto no era solo su asunto, sino un asunto de todas sus hermanas y mujeres musulmanas que vendrían después de ella. Se negó a retirarse de la presencia del Profeta hasta que se resolviera su problema. Allah (SWT) reveló los versos:

Dios oyó las palabras de quien reclamaba ante ti [¡oh, Muhammad!] acerca de su esposo y se quejaba por su aflicción ante Dios, y Dios escuchaba su diálogo porque Dios todo lo oye, todo lo ve. Quienes digan a sus mujeres: «¡Eres para mí tan ilícita como mi madre!» Sepan que ellas no son sus madres. Sus madres son solo quienes los han dado a luz. Lo que dicen es reprobable y falso, pero Dios es Remisorio, Absolvedor. Quienes repudien a su mujer diciéndole: «¡Eres para mí tan ilícita como mi madre!», y luego se retracten, deberán liberar a un esclavo antes de poder cohabitar. Así es como se los escarmienta. Sepan que Dios está bien informado de cuanto hacen. Pero quien no pueda hacerlo, deberá ayunar dos meses consecutivos antes de poder cohabitar. Quien no pueda, deberá alimentar a sesenta pobres. Esto es para que crean [con sinceridad] en Dios y en Su Mensajero [y aprendan a respetar a la mujer]. Estos son los preceptos de Dios. Pero los que se nieguen a creer recibirán un castigo doloroso. (Corán 58: 1-4)

Khawla (RA) exigió justicia y Allah (SWT) reveló que los hombres no tienen derecho a tratar a sus esposas como esposas cuando sienten deseo y luego tratarlas como si no lo fueran cuando están enojados. [iv]

SUMAYYA- LA MÁRTIR


Sumayya (RA) era una esclava que aceptó el Islam en un momento que era muy peligroso hacerlo. Estaba entre las personas más vulnerables a la persecución de los Quraysh ya que, como esclava, no tenía protección en el sistema de clase árabe, algo que el Islam luego abolió.

Entonces, ella, su esposo y su hijo estaban entre los nuevos musulmanes que fueron torturados por su elección de fe. En un episodio de tortura particularmente espantoso a manos de Abu Jahl, a Sumayya (RA) le dijeron que podía salvarse de la tortura si renunciaba a su fe. Abu Jahl le dio repetidamente esta opción y ella se negó todas las veces.

Abu Jahl la empaló, matándola por negarse a abandonar su fe en Dios. Ella se convirtió en la primera mártir del Islam. Por su valentía y coraje de convicción frente al dolor extremo e incluso la muerte, se le concedió el Paraíso. [v]

NUSAYBAH- LA GUERRERA


Nusaybah participó en numerosas batallas para defender el Islam. Pero Nusaybah es famosa por su valentía en la Batalla de Uhud. El Profeta (PyB) dijo sobre ella: «Dondequiera que giraba, izquierda o derecha, en el Día de Uhud, la veía luchando por mí». Ella fue infligida con 13 heridas. A pedido de Nusaybah, el Profeta (PyB) le pidió a Allah (SWT): «Oh Allah, hazlos mis compañeros en el Jardín».

No solo fue valiente en la batalla, sino que también fue una defensora de las mujeres musulmanas. Le preguntó al Profeta (PyB) por qué el Corán solo mencionaba a los hombres, y no a las mujeres. Poco después Allah (SWT) reveló:

Dios les tiene reservado Su perdón y una gran recompensa a los musulmanes y las musulmanas, a los creyentes y las creyentes, a los piadosos y las piadosas, a los justos y las justas, a los pacientes y las pacientes, a los humildes y las humildes, a los que hacen caridades y a las que hacen caridades, a los que ayunan y las que ayunan, a los pudorosos y las pudorosas, a los que recuerdan frecuentemente a Dios y a las que recuerdan frecuentemente a Dios. ( Corán 33:35) [vi]

AL-SHIFA- LA SHERIFF


Al-Shifa (RA) llegó al Islam durante la época del Profeta (PyB). Era conocida por ser muy inteligente y podía leer y escribir en un momento en que la mayoría de las personas eran analfabetas. Debido a su educación, el Profeta le pidió que le enseñara a su esposa a leer y escribir, y ella lo aceptó.

Debido a su mente aguda e inquisitiva, se convirtió en una erudita del Islam, y durante el Califato de Umar (RA), fue nombrada para supervisar el mercado.

“Sus deberes eran asegurar que las prácticas comerciales siempre fueran consistentes con el Islam. Iría por el mercado, asegurándose de que no se hicieran trampas o trucos y que el comprador y el vendedor se ajustaran a los valores islámicos. Umar les dijo a los comerciantes que si tenían dudas sobre la legalidad de una transacción en particular, deberían preguntarle a Al-Shifa». [vii]


Al-Shifa sirvió y protegió a su pueblo.

QUIÉNES SON LOS HERMANOS Y HERMANAS DEL PROFETA MUHAMMAD?


Escrito por Theresa Corbin, traducido por Cinthia N. Mascarell

Hace un tiempo, leí algo que realmente me hizo pensar en ser una compañera del profeta Muhammad (la paz sea con él). ¿Cómo hubiera sido?

¿Cuán fácil hubiera sido tener acceso real al Mensajero de Allah?

¿Cuán difícil hubiera sido enfrentar a los enemigos del Islam?

¿Y cuánto consuelo habría sido para mi corazón solo verlo?

Entonces recordé que no era la voluntad de Allah ser una compañera del Profeta. Y me sentí muy lejos de él (la paz sea con él).

Soy de una época que él no reconocería. Vivo en una sociedad diferente, hablo un idioma diferente y conozco y entiendo una cultura diferente lejos de la suya.

AMIGOS VS FAMILIA


El Mensajero de Allah (la paz sea con él) llegó a un cementerio y dijo:¡La paz sea con ustedes! La morada de los creyentes y la nuestra, si Dios así lo desea, aquellos que pronto se nos unirán. Amaría ver a mis hermanos.

Ellos (los oyentes) dijeron:

«¿No somos tus hermanos, oh Mensajero de Allah?»

Él dijo:

Ustedes son mis compañeros, y mis hermanos son los que, hasta ahora, no han venido al mundo. (Muslim)

Saber que el Profeta Muhammad ha llamado a las futuras generaciones de sus seguidores sus «hermanos y hermanas» me saca de esta pena. Porque a pesar de que estoy lejos de él en tiempo y lugar y de muchas otras maneras, me esfuerzo por ser su hermana, su familia.

Si lo piensas, ¿hay algo más cercano que un hermano?

Todos tenemos compañeros, amigos que nos acompañan y escuchan nuestros problemas, e incluso siguen nuestros consejos. Pero al final del día, nadie está más cerca de nosotros que nuestros hermanos y hermanas. Nadie está más cerca de ti que tu familia.

Al llamar a quienes creerán en él en las generaciones futuras, sus hermanos trae consuelo a mi corazón y me hace sentir muy cerca de él. Pero, ¿cómo podemos estar más cerca de él que sus compañeros?

CREER SIN VER


El Profeta Muhammad (la paz sea con él) fue visto por sus compañeros llorando. Los compañeros dijeron:

«¿Qué te hace llorar, Oh Mensajero de Allah?»

Él dijo:

Extraño a mis hermanos.

Ellos dijeron:

«¿No somos tus hermanos, Oh Mensajero de Allah?»

Él dijo:

No, ustedes son mis compañeros. Mis hermanos son los que vendrán después de mí y creerán en mí sin verme. (Ad-Darimi, At-Tabarani, Al-Hakim. Énfasis agregado)

Imagina ser un compañero y escuchar las noticias de que no eres el hermano del mensajero.

Esto debe haber sido difícil para ellos escuchar.

Sin embargo, este estatus se reservó para aquellos que se sentirían lejos de él por la distancia del tiempo, pero que aún creerían en su mensaje de Allah sin siquiera verlo (la paz sea con él).

Creer en alguien sin siquiera verlo es el máximo amor y confianza que nos hace tan cercanos.

¿CÓMO PODEMOS AUMENTAR NUESTRO AMOR Y ACERCARNOS A ÉL?


Pero aún así muchos de nosotros nos sentimos lejos de él, a pesar de que sentimos un gran amor y respeto por él. Entonces, ¿cómo podemos sentirnos más cerca?

Hay muchas maneras de sentirse cerca del Profeta Muhammad y, por lo tanto, cerca de Allah. Podemos:

ENVÍAR BENDICIONES CON ÉL


Simplemente decir «la paz y bendiciones sean con él», o «sallallahu alayhi wasallam» en árabe, estamos haciendo lo que Allah ha pedido y acercándonos a Él y a Su mensajero.

Dios bendice al Profeta y Sus ángeles piden [a Dios] que lo bendiga. ¡Oh, creyentes! Pidan bendiciones y paz por él. (Corán 33:56)

El profeta Muhammad (la paz sea con él) dijo:

Allah tiene ángeles que andan por la tierra y me transmiten el salam de mi ummah. (An-Nasa’i)

Y cada vez que enviamos un saludo al Profeta (la paz sea con él), él nos responde. El profeta dijo:

Ninguno de ustedes me envía sus saludos, sin que Allah me devuelva el alma a mi cuerpo (en la tumba) y yo le devuelvo su saludo. (Abu Dawud. Énfasis agregado)

Imagina ser el hermano o la hermana de un ser humano tan grandioso, y luego hacer que te devuelva el saludo. Es realmente un honor.

APRENDE SOBRE SU VIDA


Muchos de nosotros crecieron aprendiendo la sirah (camino o vida) del profeta Muhammad. Y muchos conversos aprenden el camino de la vida del Profeta desde el principio. Pero no debemos dejar de aprender, pensando que sabemos todo lo que hay que saber sobre él.

Muchos grandes eruditos del Islam pasaron toda su vida aprendiendo y memorizando los detalles de la vida del Profeta. ¿Quiénes somos para pensar que sabemos todo lo que hay que saber después de algunos libros o conferencias? Siempre hay más para aprender sobre sus acciones y el significado de sus acciones. Es un estudio sin fin.

IMPLEMENTA SU SUNNA


Además, a medida que aprendemos, podemos aplicar la Sunna del Profeta a nuestras propias vidas. Este es el objetivo para todos los musulmanes. Esta vida de la que tenemos tanta información a través del Corán y los hadices auténticos es el ejemplo de cómo Allah desea que vivamos para complacerlo.

Al conocer al Profeta Muhammad (la paz sea con él) y conocer su vida, y enviar saludos sobre él, nos acercamos más al Profeta y a Allah Todopoderoso.

Cuanto más sepamos sobre el Profeta Muhammad (la paz sea con él), no podremos evitar amarlo y querer seguir su ejemplo.

Y al hacer esto nos acercaremos más a él que incluso sus compañeros. Nos convertiremos en sus hermanos y hermanas por quienes lloró por extrañarlos.