¿Es la felicidad en el matrimonio una cuestión de suerte?

Hacer del matrimonio un cielo o un infierno depende de nosotros.

Sin embargo, muchas personas, especialmente aquellas en matrimonios problemáticos, son propensas a ser pesimistas y prefieren culpar a todos o a todo, excepto a sus propios malos modales y mala conducta.

Algunas personas son aún más fatalistas al concluir que “un matrimonio pleno es simplemente una cuestión de suerte”. Sin embargo, ¿es este realmente el caso?

¿Podemos vivir en este mundo con tal actitud o filosofía?

¿No es esto simplemente negar la responsabilidad de nuestras propias acciones?

Más importante aún, ¿no es también desobedecer los mandamientos de Dios y luego echarle la culpa a Él (Dios) por el resultado de nuestras propias acciones y transgresiones?

Amor, Misericordia, Consuelo y Satisfacción

En el Corán, Dios nos recuerda:

Entre Sus signos está haber creado cónyuges de entre ustedes para que encuentren sosiego, y dispuso entre ustedes amor y misericordia. En ello hay signos para quienes reflexionan. (30: 21)

Si bien el Islam no ignora la base material de la compatibilidad entre la pareja cuando se casan, nada puede proteger o incluso promover la relación matrimonial si en la relación faltan el amor, la compasión, la comprensión, la cooperación, la indulgencia y la misericordia.

También vale la pena mencionar que un esposo o una esposa pueden ser aparentemente piadosos debido a que realizan ritos y rituales religiosos, pero si ignoran o son negligentes acerca de la receta y las reglas requeridas del matrimonio, esa relación está destinada a tener problemas.

Lo que empeora el caso es que, cuando se enfrentan a diferencias y disputas maritales, algunas personas no solo rompen las reglas sagradas del matrimonio, sino que no logran vivir con la mínima decencia humana y civilidad.

La mayoría de las veces, la pareja en disputa termina en una relación basada en la violencia. Sin embargo, deben recordar que, si bien las diferencias y las disputas en el matrimonio son humanas, la violencia doméstica solo muestra el carácter diabólico de una persona. Esto no es propio de un creyente.

¿Cómo puede una pareja asegurar la felicidad en su matrimonio?

Rida Beshir y Ekram Beshir, los renombrados consejeros matrimoniales y autores de “Blissful Marriage: A Practical Islamic Guide” escribieron:

“Hay recetas probadas y comprobadas para un matrimonio exitoso”. Muy apropiadamente, las llaman las “Siete C Esenciales” y las “Siete S Mágicas”.

Las Siete C Esenciales son:

Compromiso, cortesía, comunicación, cuidado, satisfacción, contribución y compromiso.

Y las Siete S Mágicas son:

Sensibilidad, sinceridad, seguridad, apoyo, satisfacción, compartir (sharing, en inglés) y gratificación sexual.

Según Beshirs, esta lista no es exhaustiva, ya que hay «Cinco maravillosas A» que, si se aplican, pueden hacer que un matrimonio sea más satisfactorio.

Ellos son:

Adaptación, acuerdo, apreciación, anticipación y aceptación.

Para concluir, el matrimonio, una institución divinamente planificada, es muy valorada en el Islam. Aquellos que socavan esta noble y sagrada institución en realidad desafían los Mandamientos de Dios y devalúan su propia dignidad humana.

Nuestra paz y felicidad en una relación marital depende de nuestra atención plena y de moldear nuestros modales de acuerdo con sus reglas y demandas.

No olvidemos que la felicidad no es una cuestión de «derecho» en el matrimonio: para obtenerla, tenemos que trabajar por ella.

Fuente: About Islam