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La historia del asesinato de Al Jusain ibn Ali


En este artículo vamos a revisar algunos detalles históricos que están basados


principalmente en fuentes chiíes (chiitas o chías), y a discutir la planificación del


asesinato injusto de Al Jusain, y analizaremos estas fuentes chiíes para ver quién


fue el verdadero asesino de Al Jusain. Dichas fuentes incluyen: ash Shia wal


Ashura de Rida Jusain Subh Al Husní, Sirah al Aimah al Izna Ashar por Hashim


Maruf Al Husní, al Mayalis al Fahkirah de Abdul Jusain Sharaf Ad Din Al


Mausawi, MactAl Jusain de Abdul Razak Al Mausawi Al Mucrim, Muntaha al


Amal de Abas al Cumí, Ala Jatai Al Jusain de Ahmad Rasim an Nafís, al Ihtiyay


de At Tabarsí, y muchos otros.


Los musulmanes amamos y respetamos a toda la familia del Profeta , incluyendo


a todas sus esposas por igual , y por supuesto, a sus amados nietos Jasan y


Jusain . Lamentamos profundamente el asesinato del nieto del Profeta  y


coincidimos en que se trató de un crimen y de una gran injusticia. Pero también


somos conscientes de que nada justifica los actos con que los chiíes conmemoran


su muerte cada año.


Contexto


Después de la muerte de Muawíyah , su hijo Yazid tomó el poder y envió


mensajeros desde la sede del poder (Cham) a las diversas tierras solicitando que


las personas prominentes le ofrecieran obediencia y le juraran lealtad. Mientras


que los mayores entre los compañeros del Profeta le prometieron obediencia, Al


Jusain (y otros como Ibn al Zubair) no lo hicieron por sus razones.


Promesas de los habitantes de Kufa


Los habitantes de Kufa le escribieron a Al Jusain  mientras estaba en La Meca,


pidiéndole que fuera a su ciudad para liderarlos, prometiéndole que le rendirían


obediencia. Al Jusain envió a Múslim bin Aquil para verificar el asunto en Kufa


antes de embarcarse en un viaje hacia allá.


Juramento de lealtad


Cuando Múslim bin Aquil llegó a Kufa, recibió juramento de lealtad de 18.000


personas, según unos, y de 40.000 según otros (fuentes chiíes). Fue hospedado


por Hani bin Urwah. El propio Múslim bin Aquil tenía sus reparos sobre el tema,


pues sabía que esa gente se había mostrado traicionera en el pasado (hacia Ali bin


Abi Tálib y Al Jasan) y cambiaban de bando con facilidad. Al mismo tiempo, An


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Numán bin Bashir se encontraba en Kufa pues había sido su gobernador de parte


de Muawíyah y Yazid lo había mantenido en ese puesto. Sin embargo, sabiendo


de la presencia de Múslim no se involucró ni le causó daño alguno, y no quería


causar divisiones, de modo que se mantuvo al margen del asunto.


Al Jusain sale para Kufa


Habiendo ocurrido esto, Múslim le escribió a Al Jusain informándole lo ocurrido,


que la gente de Kufa se le había unido, que ahora lo estaban esperando, y que


80.000 le habían jurado lealtad. Al Jusain salió entonces para Kufa, a pesar de que


los principales compañeros del Profeta le aconsejaron que no fuera, incluyendo a


Ibn Abás, Ibn Umar, Ibn Az Zubair, Yabir bin Abd Al-lah, Abu Said Al Judrí,


Abd Al-lah bin Amr bin Al As y también su hermano, Mujámmad Ibn Al


Janafíyah, quien le advirtió de la traición de la gente de Kufa contra su padre y su


hermano. Incluso después, en el momento de partir, tanto Ibn Abás como


Mujámmad Ibn Al Janafíyah le rogaron que no fuera. Sin embargo, estaba en el


decreto de Al-lah que se mantendría firme en su decisión de ir. Así que salió hacia


Kufa.


Engaño y traición de la gente de Kufa


Los habitantes de Kufa eran principalmente beduinos recién islamizados que


habían mezclado el Islam con creencias paganas de su tierra. Se autodenominaban


partidarios de Ali (chiatu Ali, de la palabra árabe “chía”, partido o bando), por lo


que algunos autores modernos los llaman chiíes, aunque en realidad el Chiismo


como se conoce hoy día aún no se había formado teológicamente. Se trataba pues,


de un grupo político, no de una religión o secta como tal. Por ello, les resultaba


fácil cambiar su lealtad según les resultara políticamente ventajoso.


Entre tanto, cuando el tirano Ubaid Al-lah bin Ziyad entró a Kufa en calidad de


nuevo gobernador de la ciudad, los habitantes que le habían jurado lealtad a


Múslim bin Aquil lo abandonaron al punto de que Múslim quedó literalmente por


cuenta propia. Múslim, de hecho, había temido y anticipado esto desde un


principio.


Múslim bin Aquil, Hani bin Urwah y Abd Al-lah bin Yactar fueron engañados


por los supuestos partidarios de Al Jusain, y fueron capturados y asesinados por


Ubaid Al-lah bin Ziyad. La noticia de ello le llegó a Al Jusain en una carta


(enviada por Múslim bin Aquil antes de ser asesinado) en la que se afirmaba que


sus partidarios de Kufa los habían abandonado y engañado (a Múslim bin Aquil


y Hani bin Urwah) y que quien quisiera dar marcha atrás podía hacerlo sin ninguna


culpa sobre sí. Como resultado, la gente que había ido a reunirse con Al Jusain


comenzó a abandonarlo; cada uno tomó su propio camino, permaneciendo con él


solo sus compañeros más cercanos y sus familiares.


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Esto es mencionado por los propios chiíes en sus obras, entre ellos Abaas Al


Kumí, Abd Ar Razak Al Mausawi Al Mucrim, Baquir Charif Al Kurachí, Áhmad


Rasim An Nafís, Fadil Abás Al Hayawí, Charif Al Yauharí, Asad Haidar, Muhsín


Al Jusainí, Abd Al Hadi As Sálih, Rida Al Kazwiní y otros.


Llegada a Kerbala


Al enterarse del engaño y la traición de la gente de Kufa, Al Jusain detuvo su


camino hacia Kufa y desvió hacia Cham, dirigiéndose a Kerbala. A comienzos


del mes de Mujárram del año 61 de la Hégira, Al Jusain llegó a Kerbala (Irak) y


quienes le habían jurado lealtad en Kufa, tras haberlo abandonado, conspiraron


contra él. Al Jusain reunió a quienes seguían con él y a su familia, y pronunció un


sermón en Kerbala en el que insultó a los habitantes de Kufa llamándolos


“taguts,” “quienes tiran el Libro por sus espaldas,” “criminales,” “erradicadores


de Sunan,” “asesinos de los hijos de los profetas,” “aquellos cuyas creencias


están llenas de jaraam” y cosas similares.


Este sermón está documentado en las obras chiíes y su redacción es la misma


donde ha sido citado por Ali bin Musa bin Tawús, Abd Ar Razak Al Mucrim,


Faadil Abás Al Hayawí, Haadi An Nayafí, Jasan As Sáfar, Muhsín Al Amín, Abás


Al Kumí y muchos otros. Y aquí llegamos al asesinato de Al Jusain  por parte


de los criminales.


Emboscada y asesinato


Mientras estaba en Kerbala se mantuvieron conversaciones entre él y Amr bin


Sad, el representante de Ubaid Al-lah bin Ziyad, gobernador de Kufa. Al Jusain


sabía que Ubaid Al-lah quería matarlo, así que le imploró que hiciera una de estas


tres cosas: Que lo llevara ante Yazid, el Califa (quien él sabía que no lo mataría);


que lo regresara a Jiyaz; o que lo llevara a una de las regiones fronterizas de los


musulmanes, donde permanecería.


Ninguna de estas fue aceptada por Ubaid Al-lah bin Ziyaad, y esto condujo a la


batalla de Kerbala. Amr bin Sad lideró el contingente de Kufa con Chamar bin


Dil Yaushán y otros de los autodenominados “chiatu Ali” de Kufa, y rodearon a


Al Jusain. Debido a que los sobrepasaban en número y poder, Al Jusain y quienes


estaban con él fueron asesinados, y el asesino de Al Jusain fue Chamar bin Dil


Yaushán.


Junto con Al Jusain fueron asesinados otros hijos de Ali bin Abi Tálib, entre ellos


(según numerosas autoridades chiíes) Abu Báker bin Ali, Umar bin Ali, Uzmán


bin Ali, y también los nietos de Ali hijos de Al Jasan, Abu Báker bin Al Jasan bin


Ali y Umar bin Al Jasan bin Ali.


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Nota: ¿Han notado que los miembros de Ahl al Bait que fueron asesinados con


Al Jusain llevaban los nombres de Abu Báker, Umar y Uzmán? Entonces


entenderán por qué los clérigos chiíes nunca mencionan sus nombres cuando


cuentan la historia de Kerbala desde los púlpitos: si lo hicieran, los chiíes del


común se darían cuenta de que los miembros de Ahl al Bait amaban tanto a los


primeros tres califas, que les pusieron sus nombres a sus propios hijos.


Lo que dicen las autoridades e historiadores chiíes sobre quién asesinó a Al


Jusain


Las autoridades, historiadores y escritores chiíes confirman que fueron los


habitantes de Kufa que se hacían llamar “partidarios de Ali” los que, después de


abandonar a Al Jusain, y actuando a traición a pesar de que el juramento de lealtad


que le habían hecho todavía resonaba en sus oídos, lo mataron y tomaron cautiva


a su familia. Todas las citas que siguen a continuación son tomadas de autoridades


chiíes.


El consejo de Mujámmad Ibn Al Janafíyah, hermano de Al Jusain, quien le dijo:


“¡Oh, hermano!, ya conoces la traición de la gente de Kufa hacia tu padre y hacia


tu hermano. Y temo que tendrás la misma suerte que ellos.” [Al Malhuf de Ibn


Tawús (p. 39), Ashura de Al Ihsaí (p. 115), Al Mayalis al Fajírah de Abd Al Jusain


(p. 75), Muntaha Al Amal de Abás Al Kumí (1/454).]


Lo dicho por Al Jusain acerca de los chiatu Ali de Kufa:


“¡Oh, Al-lah!, juzga entre nosotros y el pueblo que nos pidió que los ayudáramos,


y que luego nos mató.” [Muntaha Al Amal de Abás al Kumí (1/535).]


El escritor chií Jusain Al Kaurani escribió:


“Al pueblo de Kufa no le bastó con separarse del Imam Al Jusain, sino que el


resultado de que cambiaran sus colores los condujo a una tercera posición, que


fue que comenzaron a prepararse para salir hacia Kerbala a fin de combatir contra


el Imam Al Jusain. Y en Kerbala se afanaron (apresurándose unos a los otros) a


tomar sus posiciones, las que complacieron a Chaitán y enojaron a Ar Rajmán


(Al-lah). Por ejemplo, encontramos que Amr bin Al Hayay, quien apenas el día


anterior era prominente en Kufa como si fuera el guardián del santuario de Ahl al


Bait y defensor de ellos, y aquel que lideró un ejército para salvar a Hani bin


Urwah, se tragó todas sus posiciones aparentes a fin de acusar al Imam Al Jusain


de abandonar la religión, lo que se refleja en el siguiente texto: «Combatan a aquel


que abandonó la religión y se separó de la yamá (refiriéndose a Al Jusain)...»” [Fi


Rihab al Kerbala (pp. 60-61).]


Y al Kaurani escribió también:


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“Y hallamos otra postura que indica la hipocresía de la gente de Kufa, Abd Al-lah


bin Hawzah At Tamimí se plantó frente al Imam Al Jusain y gritó: «¿Jusain está


con ustedes?,» a pesar de que era del pueblo de Kufa y apenas el día anterior era


uno de los que decían apoyar a Ali (chiatu Ali), y es posible que haya sido uno de


los que le escribieron al Imam (Al Jusain) o del grupo de Chabaz y otros, quienes


le escribieron (a Al Jusain desde Kufa)... entonces él (viene y dice): «¡Oh, Jusain,


recibe buenas noticias del Fuego...!»” [Fi Rihab al Kerbala (p. 61).]


Y otro autor chií, Murtadá Mutahiri escribe, respondiendo una pregunta que se


hace a sí mismo: ¿Cómo fue que la gente de Kufa se embarcó en la lucha contra


Al Jusain a pesar de su amor y su apego sentimental hacia él?:


“Y la respuesta es el temor y el miedo que se habían arraigado en el pueblo de


Kufa en general desde la época de Ziyad y Muawíyah, y que había crecido,


aumentando hasta proporciones alarmantes a la llegada de Ubaid Al-lah [bin


Ziyad], que a su llegada mató de inmediato a Maizam At Timar, Rashid, Múslim


y Hani...” [Al Malhámah al Jusainíyah (3/47-48).]


El chií Kadim Al Ihsaí An Nayafí dice:


“El ejército que se dispuso a combatir contra el Imam Al Jusain era de 300.000


(en número), todos ellos de la gente de Kufa (que se decían ser el partido de Ali).


Entre ellos no había ningún iraquí, jiyazí, indio, paquistaní, sudaní, egipcio o


africano. Al contrario, todos eran del pueblo de Kufa y se habían reunido a partir


de muchas tribus diversas.” [Ashura (p. 89).]


El historiador chií Jusain bin Áhmad Al Baraquí An Nayafí dijo:


“Al Kazwiní dijo: «Y aquello por lo que se le ha mostrado desprecio a la gente de


Kufa fue que ellos injuriaron a Al Jasan bin Ali y asesinaron a Al Jusain después


de haberlo invitado ellos mismos (a ser su líder)».” [Tarij al Kufa (p. 113).]


Y el punto de referencia chií, Ayatolá Al Udmá Muhsín Al Amín, dijo:


“Entonces, 20.000 del pueblo de Irak que habían jurado lealtad a Al Jusain, lo


traicionaron, se rebelaron en su contra mientras su promesa de lealtad aún


resonaba en sus oídos, y lo asesinaron.”


Y Yawad Muhdizí dijo:


“Y el Imam Al Jasan fue enfrentado por ellos a traición, y Múslim bin Aquil fue


asesinado injustamente entre ellos, y Al Jusain fue asesinado mientras era


derrotado en Kerbala, cerca de Kufa, a manos del ejército de Kufa.”


Numerosas autoridades chiíes, de entre sus chaijs, citan de Ali bin Al Jusain bin


Ali bin Abi Tálib (conocido como Zain Al Abidín) que él se dirigió a los


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autodenominados “partidarios de Ali” que abandonaron a su padre y lo


asesinaron, y los insultó diciéndoles:


“¡Oh, gentes!, les imploramos por Al-lah, ¿saben que ustedes le escribieron a mi


padre y lo engañaron, y que le juraron lealtad, hicieron un pacto con él y lo


mataron y abandonaron? Así que puede que perezcan por lo que se han puesto


enfrente ustedes mismos y por su mala opinión. Con qué ojos mirarán al


Mensajero de Al-lah  cuando él les diga: «Ustedes mataron a mi familia y


violaron mi santidad, así que no son de los míos».” [At Tabarsi en Al Ihtiyay


(2/32), Ibn Tawús en Al Malhuf (p. 92), Al Amín en Al Lawaiy al Ashyán (p.


158), Abás Al Kumí en Muntaha al Amal (1/572), Jusain Kawrani en Fi Rihaab


al Kerbala (p. 183), Abd Ar Razak Al Mucrim en Mactal Jusain ((p. 317), Murtadá


Iyad en Mactal Jusain (p. 87) y Rida Al Kauziní en Tadlim Az Zahrá (p. 262),


Abás Al Kumí en Nafs Al Mahmum (p. 360).]


Y cuando Ali bin Al Jusain Zain al Abidín vio al pueblo de Kufa gimiendo y


llorando, los reprendió diciéndoles:


“Ustedes se lamentan y lloran por nosotros, ¿entonces quiénes son los que nos


mataron?” [Mactal Jusain de Murtadá Iyaad (p. 83), Tadlim Az Zahrá de Al


Kazwiní (p. 257) y Al Malhuf de Ibn Tawús (p. 86), Nafs al Mahmum de Abás al


Kumí (p. 357).]


Y en otra narración, él pasó al lado de ellos y estaba enfermo, y dijo con voz débil:


“¿Están gimiendo y llorando por nosotros? ¿Quiénes son los que nos mataron?”


[Abás Al Kumí en Muntaha al Amal (1/570).]


Y en otra narración, él dice:


“Esta gente llora por nosotros, ¿pero quién sino ellos nos han matado?” [Al


Ihtiyay de At Tabarsi (2/29).]


Y las fuentes chiíes citan a Umm Kulzum bint Ali  diciendo:


“¡Oh, pueblo de Kufa! Que la desgracia caiga sobre ustedes. ¿Qué pasa con


ustedes, que han abandonado y asesinado a Jusain, despojándolo de su riqueza y


su herencia, han tomado cautivas a sus mujeres y le han causado angustia? Ojalá


perezcan y sean aniquilados… ¡Qué carga se han puesto sobre sus espaldas y


cuánta sangre han derramado!... Han matado al mejor de los hombres después del


Profeta  y la misericordia ha sido arrebatada de sus corazones.” [Nafs al


Mahmum (p. 262), Mactal Jusain de Al Mucrim (p. 316), Lawaiy al Ashyán (p.


157) y otros.]


Y el chií Asad Haidar cita a Zainab bint Ali bin Abi Tálib , que también es


mencionada por At Tabarsi en al Ihtiyay (2/29-30):


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“Para continuar, ¡Oh, pueblo de Kufa!, pueblo del engaño, la traición y la


deserción... su ejemplo es como el de aquella que hila solo para luego reventar el


hilo. ¿Tienen ustedes algo más que jactancia, extrañeza, odio manifiesto y


falsedad?... ¿Lloran ustedes por mi hermano? Sí, por Al-lah, lloren mucho y rían


poco, pues se han puesto a prueba a través de su infamia… ¿y cómo pueden


considerar poco el asesinato del descendiente del Sello de la Profecía?” [Maal


Jusain Fi Nahdatihi (p. 295).]


Muhsín Al Amín Al Jusainí Al Amilí dice en su libro “Fi Rihab Aimah Ahl al


Bait” (1/9):


“Zahar bin Cais participó en las [batallas] de Al Yamal y Sifín con Ali, y Chabaz


bin Rubií y Chamar bin Dil Yaushán Al Diyabí también estuvieron en la [batalla]


de Sifín con él. Luego emprendieron la guerra contra Al Jusain en el día de


Kerbala, así que fue un fin maligno (su al jatimah) para ellos, y buscamos refugio


en Al-lah del fin maligno.


Y en el libro Al Irshad del famoso y reconocido erudito chií Al Chaij Al Mufid


(2/95-96 en adelante) menciona a los que se dispusieron a combatir y asesinar a


Jusain:


“Y Umar bin Sad se levantó esa mañana, y era el día de Yúmuah (viernes), y se


dice que era sábado, y él movilizó a sus compañeros y luego partió con esa gente


que estaba con él dirigiéndose hacia Al Jusain; a su derecha estaba Amr bin al


Jaay, y a su izquierda estaba Chamar bin Dil Yaushán, y a cargo de la caballería


estaba Urwah bin Cais, y a cargo de la infantería estaba Chabaz bin Rubií, y él le


dio su bandera a Duraid, su maulá.”


En las siguientes 20 páginas aproximadamente, da cuenta de la lucha, que culminó


con la muerte de Al Jusain  a manos de Chamar bin Dil Yaushán.


Los musulmanes frente al asesinato de Al Jusein 


Las palabras de Ahl al Bait (la familia del Profeta ) a los que se decían ser


“chiatu Ali” (los partidarios de Ali) y supuestos defensores de Ahl al Bait,


“ustedes se lamentan y lloran por nosotros, aunque son ustedes los que nos


mataron”, expone el fraude de quienes afirman que los chiíes apoyaron a Al


Jusein  y fueron masacrados con él, ya que en aquella época el Chiismo como


lo conocemos hoy día no existía (ni el duodecimano ni el ismaelí), y quienes


causaron la muerte de Al Jusein fueron precisamente los que se decían partidarios


de Ali, que es como se autodenominan los chiíes actuales.


Los musulmanes consideramos el asesinato de Al Jusein como un crimen atroz y


una gran tragedia, pero también fueron crímenes y tragedias los asesinatos de los


califas Úmar, Uzmán y Ali, y otros crímenes llevados a cabo por traidores que


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aseguraban engañosamente defender al Islam o a Ahl al Bait. Sin embargo, a


diferencia de muchos chiíes, los musulmanes no conmemoramos estos crímenes


con costumbres bárbaras como cortarse con cuchillos, autoflagelarse, bañarse en


sangre de animales sacrificados, etc. Nada de eso está justificado, y lo correcto de


acuerdo al Islam es pedirle a Al-lah que les conceda el Paraíso a los mártires y


que castigue a los criminales.


Adaptado y ampliado a partir del artículo en inglés en:


www.shia.bs/articles/zgurgns-the-shia-of-kufah-deceived-deserted-ambushedand-


murdered-the-grandson-of-the-prophet-al-husayn.cfm


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