1. Principio islámico: La gente nace libre, la esclavitud es temporal.
El Corán afirma:
"¡Oh, seres humanos! Los he creado a partir de un hombre y de una mujer, y los congregué en pueblos y tribus para que se reconozcan los unos a los otros. El mejor de ustedes ante Dios es el de más piedad. Dios todo lo sabe y está bien informado de lo que hacen". (Corán 49:13)
El Profeta del Islam declaró:
"Todos ustedes provienen de Adán, y Adán fue creado del polvo"[1].
El principio de que los seres humanos nacen libres y la esclavitud es accidental es aceptado por todos los eruditos del Islam. Algunas consecuencias importantes de este principio son:
·No se permite la esclavitud voluntaria. Una persona libre no puede convertirse en esclava aunque así lo desee.
·Una persona libre no puede ser esclavizada. El punto interesante es que los teólogos musulmanes no han decidido esto, sino que fue el mismo Profeta del Islam, Muhammad (que la paz y las bendiciones de Dios sean con él) quien declaró esto como pecado hace más de 1.400 años. Él dijo: "Hay tres tipos de personas en contra de las cuales yo mismo haré demandas en el Día del Juicio. Entre estos está aquel que esclaviza a una persona libre, la vende y consume este dinero"[2].
·Un niño abandonado cuyos padres son desconocidos debe ser tratado como persona libre, aún si el niño parece tener padres esclavos.
2. Al esclavo se le concedió respeto y dignidad humana.
La propia palabra "esclavo" en español tiene connotaciones muy negativas de tratamiento bárbaro. Comparemos esto con lo que dijo el Profeta de la Misericordia acerca de los esclavos hace 1.400 años:
"¡Tus esclavos son tus hermanos! Dios los ha puesto bajo tu cuidado. Así, quien tenga a su hermano bajo su cuidado, debe alimentarlo con lo mismo que él come y vestirlo del mismo modo que él viste. Y no ponerle cargas más allá de sus capacidades; pero si les pones cargas (que les sean insoportables), entonces ayúdalos (compartiendo su carga extra)"[3].
"Cuando el siervo de cualquiera de ustedes prepare comida para él y haya terminado con su labor de calor y humo, deben hacer que (el siervo) se siente con ustedes y hacerlo comer (junto a ustedes); y si él decide no hacerlo, entonces deben separar una porción para él"[4].
El Profeta de la Misericordia prohibió golpear a los esclavos. Declaró que la expiación por haber golpeado o abofeteado a un esclavo, es liberarlo[5].
Por otra parte, un esclavo no será tratado con palabras hirientes. El Profeta de la Misericordia ordenó no tratarlos como "mi esclavo" o "mi esclava". Él dijo: "¡Todos somos esclavos de Dios!". Diríjanse a ellos como "joven" o "jovencita"[6].
Umar ibn Al Jatab, el segundo califa del Islam, tenía tanto aprecio por Salim, un esclavo liberto, que deseaba que estuviera vivo aún para nombrarlo califa. Salim solía dirigir a los musulmanes durante la oración, lo que se considera un honor en la tradición islámica.
3. El Islam no dio inicio al sistema esclavista, este ya existía en el judaísmo, el cristianismo, así como en la India y en la China, antes del Islam.
Desde sus primeros tiempos, el Islam ha abierto las puertas para liberar a los esclavos y finalmente terminar la esclavitud. El paradigma islámico no ignora las realidades del mundo ni las aprueba; el Islam las regula. Como señaló Annemarie Schimmel, un erudito alemán: "…por lo tanto, la esclavitud está teóricamente condenada a desaparecer con la expansión del Islam"[7].
La ley de la Sharía limita severamente los canales por los cuales se podría multiplicar el número de esclavos. La única fuente de esclavitud eran los cautivos en guerra legítima y los hijos nacidos de padres esclavos. En caso de guerra, los cautivos no necesariamente debían ser esclavizados. La escritura islámica dio otras opciones sobre cómo tratar con ellos:
·Liberación incondicional (Corán 47:4).
·Pago de rescate (Corán 47:4).
Después de limitar las fuentes de nuevos esclavos, la ley islámica se ocupó de la realidad de los esclavos ya existentes.
4. El Islam concede iguales derechos religiosos a los esclavos y a las personas libres, al igual que en la mayoría de los asuntos civiles. Sus leyes especiales fueron hechas para facilitar sus trabajos.
Los esclavos estaban en el mismo plano del hombre libre en términos de obligaciones religiosas, así como de la recompensa y el castigo de Dios. Un testimonio de un esclavo era considerado aceptable. Un esclavo tenía derecho a la propiedad y las pertenencias personales. Los esclavos eran iguales en cuanto a la indemnización por el asesinato de un familiar. Se los debía ayudar a ganar legalmente su libertad si así lo deseaban, a través de un mecanismo conocido como mukataba y tadbir. Este mecanismo está consagrado por Dios en la escritura musulmana en 24:33.
5. El Islam hace de la liberación de esclavos un acto de culto agradable a Dios.
El Islam estableció la liberación de esclavos como expiación de pecados y para actos específicos de transgresión. A los musulmanes se los alienta a liberar voluntariamente a los esclavos para liberarse a sí mismos del tormento del fuego del Infierno. El Estado también era una fuente para liberar esclavos, ya que la Ley Islámica dictamina que el azaque (caridad obligatoria dada por los musulmanes pudientes) debe gastarse, entre otras cosas, en la liberación de esclavos (Corán 9:60).
6. El Islam integró a los esclavos en la sociedad en general.
La cuestión de la integración de los esclavos liberados en la sociedad dominante ha sido discutida por algunos eruditos contemporáneos. La solución islámica fue integrarlos a la sociedad haciéndolos parte de tribus y familias. El sistema fue conocido como wala’. El Profeta del Islam dijo: "Liberar esclavos es como establecer relaciones de sangre"[8].
Algunas observaciones históricas
1. Abul Ala Maududi escribe en su artículo La posición de la esclavitud en el Islam: "El Profeta mismo liberó al menos a 63 esclavos. El número de esclavos liberado por Aishah fue de 67, Abás liberó a 70, Abdal-lah ibn Omar liberó a mil, y Abdur Rahmán compró treinta mil esclavos y los liberó".
2. "A Zaid, el liberto del Profeta, se le confió a menudo el comando de las tropas, y los capitanes más nobles sirvieron bajo su mando sin reparos; y su hijo Osama fue honrado con el liderazgo de la expedición enviada por Abu Báker contra los griegos. Kutb Ud Din, el primer rey de Deli y, por tanto, el verdadero fundador del imperio musulmán en la India, fue esclavo"[9].
3. "Incluso los siervos domésticos ordinarios fueron a menudo mejor alimentados, vestidos y protegidos que muchos hombres y mujeres libres"[10].
4. "Toda la historia del Islam prueba que los esclavos podían ocupar cualquier cargo, y muchos antiguos esclavos militares, generalmente reclutados entre los turcos de Asia central, se convirtieron en líderes militares e incluso en gobernantes en el este de Irán, la India (la dinastía esclava de Deli) y el Egipto medieval (los mamelucos)"[11].
5. "…la exclusividad de la relación amo-esclavo que tipifica los sistemas esclavistas, nunca fue parte de las realidades otomanas. El sistema de cortes basado en la Sharía quebró esta exclusividad al permitirles a los esclavos quejarse de malos tratos, lo que llevaba a la manumisión forzada. Si bien, como hemos visto, las cortes se mostraban reacias a intervenir en las relaciones amo-esclavo y el Estado era cuidadoso en no obligar a los amos a liberar a los esclavos involuntariamente, un mecanismo de arbitraje estaba siempre disponible de fondo, capaz de dar un paso en esa relación si era necesario"[12].
6. "En cuanto a los esclavos de Arabia Saudita, ellos compartían la misma comida, vestido y hogares que sus amos, y muchos de ellos se convirtieron en gobernantes de vastas extensiones de tierra, y eran activos en el funcionamiento del Estado"[13].
7. "…La abolición de la esclavitud en Arabia Saudita fue tardía. Fue abolida en 1962… esto se debió a que Arabia Saudita no existió como Estado moderno hasta 1932, lo que significa que le tomó solo treinta años desde su creación darle fin a la esclavitud, y lo hizo sin una guerra civil"