LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL MATRIMONIO: SUGERENCIAS DE UNA CONSEJERA
Por Hannah Morris
La «inteligencia» generalmente nos hace pensar en las habilidades cognitivas y el desempeño intelectual. Es cierto, pero cuando se trata de relaciones, especialmente una relación matrimonial, la «inteligencia emocional» es el tipo de inteligencia más importante y eficaz para fomentar relaciones saludables.
La inteligencia emocional es primordial en la comunicación para un matrimonio fuerte y saludable.
¿QUÉ ES LA INTELIGENCIA EMOCIONAL?
La inteligencia emocional es la capacidad de identificar y gestionar las propias emociones, así como las emociones de los demás. Según el psicólogo estadounidense Daniel Goleman, la inteligencia emocional consta de cinco elementos:
1- autoconciencia
2- autorregulación
3- motivación
4- empatía
5- habilidades sociales
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN UN MATRIMONIO?
El uso de la inteligencia emocional te permite concentrarte en las emociones tuyas y de tu cónyuge, y responderse de manera apropiada y efectiva. Sin ella, una pareja puede experimentar problemas de comunicación, malentendidos y complicaciones innecesarias.
Cuando las personas experimentan emociones negativas, comúnmente se desahogan con las personas más cercanas a ellas asumiendo que este es el mejor y más seguro lugar para expresar esos sentimientos. Para las parejas casadas, el destinatario de estos arrebatos emocionales es a menudo el cónyuge, que puede conducir a más momentos emocionales no regulados, incluidas las peleas.
Una persona emocionalmente inteligente es capaz de regular sus emociones y tratarlas adecuadamente en el momento correcto y en el lugar correcto (por ejemplo, no frente a los niños o apurados antes del trabajo) en lugar de dejarlas de lado o descargarlas sobre su cónyuge.
Reconocer las emociones propias y de tu cónyuge te ayuda a controlarlas más. Por ejemplo, comprender que cuando tú o tu cónyuge se sienten frustrados no es un buen momento para hablar con sobre el pago de facturas o cualquier otro tema que con frecuencia provoca un sabor amargo.
LA EMPATÍA ES LA CLAVE
Cuando los cónyuges son sensibles a las emociones del otro, pueden ser más compasivos con las luchas que cada uno enfrenta. ¿Cuántas veces has tenido un estallido de ira irracional porque tu cónyuge llegó tarde a casa o porque dejó el lugar desordenado y tú acabas de limpiar?
En realidad, estaba cansado/da y exhausto/ta después de un largo y duro día y tú te quejaste, en lugar de considerar cómo se siente, exhausto/ta. O tal vez él/ella estuvo tan ocupado/da atendiendo a los niños que no tuvo el tiempo o la energía para ordenar el lugar.
Los cónyuges que entienden y están en contacto con las emociones de su pareja se abstendrán de hacer comentarios negativos sabiendo que esto es inapropiado y que solo aumentarán el agotamiento mental. Cuando esta apreciación está presente, es menos probable que los cónyuges apunten a las fallas entre ellos o respondan irracionalmente a ciertos escenarios.
CÓMO LA INTELIGENCIA EMOCIONAL MEJORA TU MATRIMONIO
Hay muchas formas, que incluyen:
1- Puedes anticiparte a las necesidades de tu cónyuge y responder a ellas sin tener que preguntar.
2- Lo más probable es que recurran a ti en busca de apoyo emocional en lugar de ir a otra persona o desahogarse de manera inapropiada.
3- Beneficios físicos: todos necesitan sentir que alguien se preocupa por ellos. Tener un cónyuge en el que confiar para compartir tus emociones y obtener apoyo aumenta el bienestar personal y las relaciones matrimoniales.
4- Cuidar tus propias emociones y ser sensible a las de tu cónyuge tiene consecuencias generales, que te ayudarán ser una mejor versión de ti mismo, lo que te dará una mayor satisfacción con la vida, incluso en tu matrimonio.
CONSEJOS PARA SER EMOCIONALMENTE INTELIGENTE AL TRATAR CON TU CÓNYUGE
El pasado disfuncional y traumas en la vida pueden dañar nuestra inteligencia emocional y causar dificultades para lidiar con las emociones en general y en nuestro matrimonio.
Por lo tanto, la inteligencia emocional no es algo natural para todos, pero alhamdu lillah, es una habilidad que se puede aprender y desarrollar, ayudando a impulsar las relaciones matrimoniales.
Hay numerosas formas en que esta habilidad se puede cultivar.
• Cuestiona tus pensamientos y considera otras perspectivas. ¿Llegó tarde del trabajo realmente porque estaba con sus amigos? ¿O se quedó hasta tarde para ganar un poco más para ayudar a las finanzas familiares? ¿O el tráfico era un caos? El primer pensamiento solo evocará sentimientos de ira, mientras que los dos últimos evocarán los de compasión.
• Presta atención a cómo tus pensamientos están vinculados a tus emociones. No le des poder a los pensamientos negativos que alimentan comportamientos negativos. Practica tener pensamientos positivos que produzcan emociones positivas.
• Identifica los signos fisiológicos y responde a ellos antes de un estallido. ¿Notas que tu corazón se acelera antes de enojarte? Esta es una señal de hacer algo con respecto a la ira antes de reaccionar usando lo que probablemente podría ser un comportamiento irracional.
• ¿Qué calma tus emociones negativas? ¿Leer, salir a caminar, respirar profundamente? Hazlo. Estas prácticas contrarrestan las respuestas fisiológicas negativas creando una calma fisiológica que dará como resultado un comportamiento más tranquilo.
• Autoconciencia: conoce lo que te provoca sentimientos negativos. Si hay ciertos lugares o temas de conversación que despiertan tus emociones negativas, planifica formas de lidiar con ellos por adelantado. Cuando tengas la cabeza despejada, antes de la reunión o conversación, encuentra soluciones para lidiar con el tema de manera inteligente en lugar de responder irracionalmente en el momento en que las emociones aumentan y la excitación es alta. Las técnicas como los ejercicios de respiración o alejarse pueden ser útiles aquí.
• Haz cosas que desencadenen emociones felices.
• Deja de hablar y solo escucha en una discusión. Te da espacio para pensar antes de responder irracionalmente y le permite a tu cónyuge sentirse escuchado y también calma sus propias emociones. De esta forma, se puede mantener una conversación más productiva con soluciones más propicias.
• Elige tus palabras con cuidado. Asume la responsabilidad de tus emociones sin culpar a tu cónyuge. Por ejemplo, di «Me siento frustrado» en lugar de «Me hiciste sentir frustrado».
Esto le proporciona a tu cónyuge información sobre tus sentimientos en lugar de culparlo. Poner la responsabilidad de tus emociones en tu cónyuge puede provocar sentimientos de culpa y la percepción de manipulación.
El que tú asumas la responsabilidad de tus emociones le da espacio a tu cónyuge para presentarse y ayudarte por su propia voluntad sin el sentimiento de culpa o la sensación de que está obligado a ayudarte.
• Cuando explotes y luego te arrepientas, busca el perdón de tu cónyuge y perdónate a ti mismo también.
• Identifica si tienes necesidades emocionales insatisfechas de tu infancia y cómo puedes buscarlas consciente o inconscientemente de tu cónyuge.
• Que tu felicidad no dependa de tu cónyuge. Si es así, entonces esta necesidad tendrá prioridad en vez de fomentar el amor en el matrimonio, ya que en lugar de amar a tu cónyuge lo necesitas.
• Identificar las emociones detrás de las palabras. Es posible que tu cónyuge no sea bueno para expresar sus emociones, pero la mayoría de las personas a menudo revelan sus sentimientos con las palabras y el tono de voz que eligen.
• Pregunta cómo se siente tu cónyuge, no lo asumas. A la mayoría de la gente le gusta sentirse comprendida. También les hace saber que te importan sus sentimientos.
• Respeta sus sentimientos buscando su contribución antes de tomar grandes decisiones.
Puedes obtener el conocimiento para practicar la inteligencia emocional y fomentar un matrimonio fuerte y saludable. Controla tus emociones y se sensible a las de tu cónyuge, responde de manera que ambos se sientan bien.
Fuente: About Islam