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ELLA CONFIÓ, ÉL DIO




Estando en la cima de la montaña sin nada y sin nadie a su alrededor, la mujer miró a lo lejos. Ella no vio a nadie. Bajó corriendo la montaña y cruzó el valle y subió a la otra montaña, mirando a lo lejos otra vez. De nuevo, no se pudo ver nada.





Su hijo estaba llorando; el pequeño bebé tenía sed y mamá no tenía una gota de agua para darle. Uno de los sonidos más duros para los oídos de un padre es el llanto de su hijo, y también lo era para ella. Así siguió corriendo entre las dos montañas una y otra vez hasta que Dios mismo intervino.





Envió al ángel Gabriel a golpear la tierra y sacar agua para la madre y el niño. Y hasta el día de hoy, esta corrida de Hajar es realizada por millones de peregrinos que van al Hajj y Umrah. Ella confió en Dios, y Dios dió.





INCLUSO DIVIDIRÁ EL MAR POR TI




Después de años y años de asesinato, saqueo y esclavitud, Dios envió a un hombre a una nación que había sufrido mucho. Quería que este hombre los llevara de la oscuridad de la opresión a la luz de la libertad, del asesino al justo gobernante. Le ordenó a Moisés que sacara a los hijos de Israel de las garras del faraón y cruzara a las tierras benditas.





Cuando escaparon, corriendo por sus vidas durante la noche, el Faraón fue notificado. Los siguió con su ejército y su caballería.





Los hijos de Israel estaban atrapados justo en frente del Mar Rojo. Algunos de ellos se desesperaron, algunos maldijeron a Moisés por solo traerles más problemas, mientras que otros solo miraban al ejército del faraón que se acercaba.





Moisés simplemente dijo, inna ma’eyah rabbi sayahdin (Ciertamente, Mi Señor está conmigo, Él guiará). Dios le ordenó a Moisés que golpeara el mar con su bastón, y el mar se partió. Él confió, y Dios partió el mar por él.





¿QUÉ ES EL TAWAKKUL?




En ambas historias, vemos una confianza inquebrantable y sorprendente en el plan y el decreto de Dios. Estos son ejemplos tan profundos que Dios los inmortalizó en el Corán hasta el final de los tiempos.





Entonces, ¿qué es lo que hizo que estas personas fueran tan dependientes de Dios y, lo que es más importante, qué hace que Dios les envíe Su ayuda en las coyunturas más críticas? Tawakkul. Entonces, ¿qué es exactamente el tawakkul?





Uno de los nombres del profeta Muhammad es al-Mutawakkil, el que continuamente confía en Dios. Y uno de los nombres de Dios es al-Wakil, Aquel en quien se puede confiar.





Cuando Ibrahim fue arrojado al fuego, dijo:





Hasbi Allahu wa ni’m-al wakil (Dios es suficiente para mí y es el mejor en quien confiar).





¡Notamos que tawakkul es una cualidad tan sorprendente que el Profeta incluso es definido por ella! ¡Se ve que también está entre las cualidades de los profetas y las personas piadosas antes que él!





ENTONCES, DE NUEVO, ¿QUÉ ES EXACTAMENTE EL TAWAKKUL?




La primera parte de la súplica de Ibrahim nos da el primer punto del tawakkul: Hasbi Allah, Dios es suficiente para mí. Lo primero y más importante para entender en la vida, en todas las esferas de la vida y en todo momento, es que no importa lo que pensemos, solo Dios es suficiente para nosotros.





Cuando esta comprensión toma el control, sabemos que no importa dónde llegue la situación, Él solo es suficiente para nosotros, y Él es el único que necesitamos.





La segunda parte es entender nuestra necesidad ante Dios. Es comprender que mientras leemos esto en casa, necesitamos tanto a Dios como el que se está ahogando y su corazón pide ayuda desesperadamente.





¡Es comprender que el niño hambriento que no sabe si tendrá comida para la próxima vez tiene tanta necesidad de Dios como nosotros, que tenemos comida como para cinco días en nuestra nevera!





La tercera parte es entender que todo lo que Dios hace es bueno para nosotros, lo percibamos o no.





Yusuf fue arrojado a un pozo. Estaba mal. Fue recogido y vendido como esclavo. ¡Parecía absurdo! La esposa de su amo intentó seducirlo, y cuando él se negó, ¡lo encarcelaron! Fue una injusticia flagrante. Y, sin embargo, ¡todo fue bueno para él!





Y es por eso que más tarde, cuando Yusuf se convirtió en el Rey de Egipto, comentó que Dios era «al-Latif«.





Al-Latif es el que es sutil. Él es quien trae beneficios a Su siervo de una manera que el siervo nunca puede percibir. ¡Aquel que está haciendo el bien por Su siervo, mientras el mundo piensa que el siervo está siendo castigado!





Entender que Dios es suficiente para nosotros, que lo necesitamos y que todo lo que permita que suceda es bueno para nosotros es la base de confiar en Él. ¿Cómo no puedes confiar en Aquel que es suficiente para ti, de quien tienes necesidad perpetua y Aquel que solo permitirá que te suceda el bien?





Tawakkul es seguir los mandamientos de Dios incluso cuando desobedecerlo parece más fácil. Es creer que Él nos otorgará el Paraíso por elegirlo por encima de los placeres fugaces de este mundo.





Es confiar nuestros asuntos a Dios y contentarnos sabiendo que Él nos cuidará.





Tawakkul es saber que todo estará bien, incluso si las cosas parecen imposibles.





Tawakkul es saber que al final del túnel hay luz, incluso si no la vemos. Es entender que cuando Dios nos protege de algo, en realidad nos está redirigiendo a algo mejor.





Tawakkul es una de las claves más importantes que causan milagros en nuestras vidas. Es uno de los frutos más bellos del árbol de la ilaha illa Allah.





Le pedimos a Dios que nos haga de aquellos que tienen Tawakkul en Él.



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