Los musulmanes seguidores reales de Jesús .
Jesús no murió por “nuestros pecados”
Algunas personas afirman que Jesús vino para morir por los pecados del mundo, pero consideren la siguiente declaración de Jesús: "Y esta es la vida eterna: que te conozca a Ti, el Único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado. Yo te he glorificado en la Tierra, he acabado la obra que me diste que hiciese" [Juan 17:3-4].
En ninguno de los cuatro evangelios Jesús afirma explícitamente que murió para salvar a la humanidad del pecado.
Estaríamos locos si arriesgáramos nuestra salvación basándose en "escrituras" falsas.
Jesús el Profeta .
“El Mesías hijo de María es sólo un Mensajero, igual que los otros Mensajeros que le precedieron, y su madre fue una fiel y veraz creyente . Ambos comían alimentos [como el resto de la humanidad . Observa cómo les explicamos las evidencias y observa cómo [a pesar de esto] se desvían”. (Corán 5:75)
“En verdad Jesús es sólo un siervo a quien agraciamos [con la profecía], y lo enviamos como ejemplo a los Hijos de Israel”.
(Corán 43:59)
“Decid: Creemos en Dios y en lo que nos fue revelado, en lo que reveló a Abraham, a Ismael, Isaac, Jacob y las doce tribus [descendientes de los hijos de Jacob], y lo que reveló a Moisés, Jesús y a los Profetas. No discriminamos entre ellos, y nos sometemos a Él”. (Corán 2:136)
“Y cuando Jesús, hijo de María, dijo: ¡Oh, hijos de Israel! Yo soy el Mensajero de Dios, enviado a vosotros para corroborar la Tora y anunciar a un Mensajero que vendrá después de mí llamado Ahmad [Éste era uno de los nombres del Profeta Muhammad . Pero cuando se les presentó con las evidencias, dijeron: ¡Esto es pura magia!”
(Corán 61:6)
Los seguidores de Jesús
“Y a quienes te discutan acerca de esta verdad [de que Jesús es un siervo de Dios y no una divinidad] después de haberte llegado el conocimiento, diles: ¡Venid! Convoquemos a nuestros hijos y a los vuestros, a nuestras mujeres y a las vuestras, y presentémonos todos nosotros. Luego roguemos seriamente que la maldición de Dios caiga sobre los mentirosos. Ésta es la auténtica verdad. No hay otra divinidad excepto Dios. Dios es el Poderoso, el Sabio. Y si la niegan, sabed que Dios conoce bien a los desviados. Di: ¡Oh, Gente del Libro! Convengamos en una creencia común a nosotros y a vosotros: No adoraremos sino a Dios, no Le asociaremos nada y no tomaremos a nadie de entre nosotros como divinidad fuera de Dios . Y si no aceptan, decid: Sed testigos de nuestro sometimiento a Dios”.
(Corán 3:61-64)
“Y cuando dijo Dios: ¡Oh, Jesús hijo de María! ¿Eres tú quien ha dicho a los hombres: Tomadnos a mí y a mi madre como divinidades en vez de Dios? Dijo: ¡Glorificado seas! No me corresponde decir algo sobre lo que no tengo derecho. Si lo hubiera dicho Tú lo sabrías. Tú conoces lo que encierra mi alma, mientras que yo ignoro lo que encierra la Tuya. Tú eres Quien conoce lo oculto . No les he dicho sino lo que Tú me has ordenado: Adorad a Dios, mi Señor y el vuestro. Mientras permanecí con ellos velé por ellos, pero después de que me llevaste Contigo fuiste Tú Quien les vigiló. Tú eres testigo de todas las cosas. Si les castigas tienes derecho, pues ellos son Tus siervos; y si les perdonas, Tú eres Poderoso, Sabio . Dios dirá [el Día del Juicio]: Éste es el día en que los sinceros son beneficiados por su sinceridad. Ellos tendrán jardines por donde corren los ríos y en los que estarán eternamente. Dios se complacerá con ellos y ellos con Él. Éste es el gran triunfo. A Dios pertenece el reino de los cielos y la Tierra, y todo lo que existe entre ellos; y Él tiene poder sobre todas las cosas”.
(Corán 5:116-120)
El mensaje de Jesús
Su mensaje era simple: Dios es uno y solo Él merece tu adoración. No tiene sentido que Dios enviara profetas durante miles de años con el mismo mensaje esencial y luego, de manera repentina, dijera que Él está en una trinidad y que debes creer en Jesús para ser salvo.
La verdad es que Jesús predicó el mismo mensaje que los profetas del Antiguo Testamento.
Jesús en el Islam
El Islam no es solo otra religión, es el mismo mensaje predicado por Moisés, Jesús y Abraham. Islam literalmente significa "sumisión a Dios" y nos enseña a tener una relación directa con Dios. Nos recuerda que, ya que Dios nos creó, nadie debe ser adorado excepto Dios, también nos enseña que Dios no es como un ser humano o como nada que podamos imaginar. El concepto de Dios está resumido en el Corán como: "Di: ‘Él es Al-lah, Uno. Al-lah es el Absoluto. No engendró ni fue engendrado. Y no hay nada ni nadie que sea semejante a Él’". (112:1-4)
Existe sólo Un Dios y sólo Uno, que ha ordenado servirle a Él, no adorar nada fuera de Él y seguir su ley, ese es el mensaje del Islam. Esto les fue ordenado a los primeros humanos y luego fue repetido por cada Profeta enviado por Dios.
Por todo esto, el Mensaje de los Profetas siempre fue el mismo, y se encuentra en la verdadera religión de Dios, el Islam, de esta manera, sólo los musulmanes siguen hoy a Jesús y sus enseñanzas.
De hecho, los musulmanes viven mucho más en consonancia con Jesús que los Cristianos de la actualidad. Respetar y amar a Jesús es obligatorio en el Islam, Dios resalta la importancia de creer en Jesús en numerosos pasajes del Corán.
el cristianismo y el Islam consideran que Jesús fue un Profeta de su religión. Sin embargo, mientras que las enseñanzas de Jesús se han perdido del credo y las prácticas de la mayoría de las iglesias
estas mismas enseñanzas son respetadas de manera evidente en el Islam.
Veamos algunos ejemplos:
Apariencia
1.Jesús dejaba crecer su barba, como la mayoría de los musulmanes, pero como muy pocos cristianos.
2.Jesús vestía modestamente. Si cerramos los ojos y formamos una imagen mental, veremos los trajes flojos y holgados, de los puños hasta los tobillos – como la túnica de los árabes y el kamiz indo-pakistaní, típico de los musulmanes de esas áreas. Lo que no nos imaginaremos nunca es la ropa apretada y seductora tan utilizada en las sociedades cristianas.
3.La madre de Jesús se cubría la cabeza con un velo, y esta práctica persistió entre las mujeres cristianas de Tierra Santa hasta mediados del siglo veinte. Nuevamente, ésta es una práctica de los musulmanes así como también de los judíos ortodoxos (a los que perteneció Jesús), pero no de los cristianos de la modernidad.
Modales
1.Jesús se enfocaba en la salvación y en evitar las galas. ¿Cuantos cristianos “virtuosos” encajan en este perfil de “No sólo los domingos”? y ¿Cuántos en el de las “cinco plegarias al día, cada día del año” de los musulmanes?
2.Jesús hablaba con humildad y bondad. No se exhibía. Cuando pensamos en sus discursos, no lo imaginamos teatralizado. Era un hombre conocido por su calidad y veracidad. ¿Cuantos predicadores del evangelio siguen este ejemplo?
3.Jesús enseñó a sus discípulos a ofrecer el saludo de Paz (Lucas 10:5), y luego dio el ejemplo: “Qué la paz sea contigo” (Lucas 10:5, Juan 20:21, Juan 20:26). ¿Quiénes siguen estas prácticas hoy en día, lo cristianos o los musulmanes? “Que la paz sea contigo” es el significado del saludo musulmán, “Assalam alaikum.” También encontramos este saludo en el judaísmo, “Shalom ‘aleijem” (Génesis 43:23, Números 6:26, Jueces 6:23, I Samuel 1:17 y I Samuel 25:6).
Prácticas Religiosas
1.Jesús fue circuncidado (Lucas 2:21). Pablo dijo que no era necesario (Rom 4:11 y GAL 5:2). Los musulmanes y los judíos creen que lo es.
2.Jesús no comía cerdo, por las leyes del Antiguo Testamento (Levíticos 11:7 y Deuteronomio 14:8). Los musulmanes también creen que el cerdo está prohibido. Los cristianos… bueno, ya se imaginarán.
3.Jesús no dio ni se benefició de la usura, de acuerdo a la prohibición del Antiguo Testamento (Éxodo 22:25). La Usura está prohibida en el Antiguo Testamento y en el Corán, así como también esta prohibida en la religión de Jesús. La economía de la mayoría de los países cristianos, sin embargo, se basan en la usura, a la cual llaman con el eufemismo de “cobro de intereses”.
4.Jesús no fornicaba, y se abstenía del contacto extramatrimonial con las mujeres. Ahora bien, esto significa: ni el más mínimo contacto físico con el sexo opuesto. Con la excepción de realizar rituales religiosos y ayudar a los necesitados, Jesús nunca tocó a una mujer más que a su madre. Los que practican el judaísmo ortodoxo mantuvieron las prácticas de las leyes del Antiguo Testamento. Como tampoco los practicantes musulmanes se dan la mano con el sexo opuesto al saludar. ¿Pueden los cristianos que “abrazan a sus vecinos” y “besan a la novia” clamar lo mismo?
Prácticas de Adoración
1.Jesús se purificaba aseándose antes de la plegaria, como también lo hacían los piadosos profetas que lo procedieron (ver Éxodo 40:32 referente a Moisés y Aarón), así como también lo hacen los musulmanes.
2.Jesús rezaba postrado (Mateo 26:39), como los otros profetas (ver Nehemiah 8:6 referente a Ezra y la gente, Josué 5:14 por Josué, Génesis 17:3 y 24:52 por Abraham, Éxodo 34:8 y números 20:6 por Moisés y Aarón). ¿Quién reza de esta manera, los cristianos o los musulmanes?
3.Jesús ayunaba por más de un mes (Mateo 4:2 y Lucas 4:2), como lo hicieron los piadosos antes que él (Éxodo 34:28, Reyes I 19:8), como lo hacen los musulmanes en su ayuno anual por el mes de Ramadán.
4.Jesús hizo peregrinaciones con el propósito de adorar a Dios, como todos los judíos ortodoxos lo hacen. La peregrinación musulmana hacia la Meca es conocida, y es profetizada en la Biblia (ver El Primer y Último Mandamiento).
Asuntos de Credo
1.Jesús enseñó la unidad de Dios (Marco 12:29-30, Mateo 22:37 y Lucas 10:27), como lo transmite el primer mandamiento (Éxodo 20:3). En ningún lugar habló de Trinidad.
2.Jesús se declara a sí mismo como un hombre y un profeta de Dios, y jamás declaró su divinidad ni pertenencia a la divinidad. ¿Qué credo es el más consistente con sus palabras, la fórmula de la Trinidad o el monoteísmo del Islam?
Al mismo tiempo, debemos respetar el hecho de que los musulmanes ejemplifican las enseñanzas de Jesús mejor que los cristianos. Además, debemos también recordar que el Antiguo Testamento predijo a tres profetas para que lo siguieran. Juan el Bautista y Jesucristo fueron los números uno y dos, y Jesucristo mismo, predijo al tercero y último. De ahí que los dos Testamentos, el Antiguo y el Nuevo, hablan de un último profeta, y no sería justo no considerar a Muhámmad como el último profeta, y al Islam como la última revelación.
Convertirse en musulmán no es darle la espalda a Jesús. Por el contrario, es regresar a las enseñanzas originales de Jesús y obedecerlo