Nadie puede saber cuándo ocurrirá el Día del Juicio. Sin embargo, Dios, en Su misericordia, enseñó a Sus mensajeros algunas de las señales que alertan sobre el hecho de que la Hora se acerca. Estas señales juegan un rol muy importante, en especial para aquellos que viven en una época distante al Profeta y no experimentan de primera mano sus enseñanzas y ejemplo. Estas señales refuerzan la creencia propia en el Profeta. Más importante aún, si uno dedica tiempo a reflexionar en ellas, son un recordatorio del Día del Juicio. Ellas deben vivificar el corazón de la persona y recordarle lo que hace en esta tierra y de dónde proviene todo esto.
Las señales de la Hora pueden dividirse en dos tipos. Primero, están aquellas que ocurren como parte de los cambios en la vida cotidiana. Se conocen como las “Señales Menores”. El segundo son los eventos extraordinarios o sobrenaturales que ocurrirán justo antes de la llegada de La Hora. Estos son conocidos como las “Señales Mayores”. Aunque el foco de este artículo serán las Señales Mayores (las principales o de mayor importancia), vale la pena hacer algunas observaciones concernientes a las Señales Menores.
“Las Señales Menores”
Si bien la intención de este artículo es cubrir las Señales Mayores, al autor le gustaría incluir algunos puntos acerca de las Señales Menores, ya que a menudo son descuidadas por la gente, que se concentra en las más “sensacionalistas” Señales Mayores. Las Señales Menores son aquellas que pueden ocurrir mucho antes del verdadero Día Final y, en general, están relacionadas con cambios cotidianos que ocurrirán en eventos mundanos. Las Señales Menores son numerosas.[1] Muchas ya han ocurrido y muchas otras continúan ocurriendo.[2] Así, las Señales Menores pueden ocurrir varias veces alrededor de un individuo que, aún así, se mantiene ajeno a ellas y a su importancia. De hecho, en el famoso Hadiz del ángel Gabriel, cuando el Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, ofreció decirle a Gabriel —en frente a sus Compañeros— algunas de las señales de la Hora (después que el Profeta fue informado al respecto), mencionó sólo algunas “Señales Menores”. Quizás, Dios lo sabe mejor, fue porque estas son las señales que tienen mucho más de un efecto sobre la vida cotidiana y la adoración, aunque el reconocimiento de estas señales a veces es más difícil o sutil.
Cuando uno es testigo de estas señales a su alrededor, ellas deben ser claros recordatorios de Dios y de la futura reunión con Él. También, deben fortificar la creencia en Dios y, en particular, en la veracidad del Profeta Muhammad. Estas señales de las cuales el Profeta habló años —incluso siglos— antes que se produjeran, deberían —adicionales a todos los hechos concernientes al Profeta Muhammad— trabajar para fortalecer la fe de un individuo sobre la veracidad del Islam. Por lo tanto, tienen un gran papel que jugar si la persona se mantiene alerta y despierta a lo que sucede a su alrededor.
Además, estas señales deben ser un recordatorio de que Dios tiene conocimiento previo de todo lo que ocurre en este mundo —así es como Él pudo transmitir estas señales a Su mensajero—. Por lo tanto, Dios también tiene conocimiento de todo lo que la persona hace. Dios está observando y es consciente de cada acto de Sus criaturas. Al menos, esta conciencia que se produce a través de atestiguar las Señales de la Hora, debería hacer que la persona adore y tema a Dios a sabiendas que Él lo está viendo. Este es el nivel superior de la fe, conocido como ihsán.
Sólo un par de señales menores serán mencionadas aquí, a la vez que alentamos al lector a investigar este tema más a fondo.
El Profeta declaró:
“De entre las señales de la Hora está la práctica frecuente de actos inmorales, los esfuerzos de la gente por promover la inmoralidad, el rompimiento de todos los lazos de parentesco y la confianza en los mentirosos”. (At-Tabarani)
La manifestación de este Hadiz se puede ver a diario en la vida de una persona, especialmente los primeros dos o tres aspectos mencionados. Uno sólo necesita salir de su casa, encender un televisor o navegar en Internet para ver cuán prominentes son los actos lascivos —aquellos actos considerados obscenos por la legislación islámica— en la actualidad. De hecho, se dedica mucho dinero y esfuerzo en producir y presentar estos actos a la mayor cantidad de gente posible.
El Profeta también dijo:
“Entre las señales de la Hora están la abundancia de riqueza, el incremento de la ignorancia, numerosas tribulaciones y la globalización del comercio y los negocios”. (Al-Hakim)
Los economistas capitalistas presumen de la cantidad de riqueza que hay en el mundo actual. De hecho, parece como si los negocios y el comercio son los asuntos más importantes en el mundo de hoy, superando los valores morales e incluso la santidad de la vida humana. Cuando esto se acompaña con ignorancia —especialmente ignorancia de la religión de Dios— y un aumento en las pruebas, tribulaciones, luchas y guerras, el resultado para la humanidad es nada menos que desastroso. Sin embargo, esto es lo que puede verse hoy en todo el mundo.
Hadices exhaustivos sobre las Señales Mayores del Día del Juicio
Las Señales Mayores son aquellas que ocurrirán relativamente cerca al Día del Juicio e involucran asuntos que pueden ser considerados, por lo general, “fuera de lo común” o que son sensacionales.
Hay un número de Hadices en los que el Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, menciona las Señales Mayores del Día del Juicio juntas. Estos Hadices incluyen el siguiente:
El Imam Muslim registró en su Sahih:
Judaifa b. Usaid al-Guifari narró: “El Mensajero de Dios vino a nosotros de repente mientras estábamos (ocupados en una discusión). Dijo: ‘¿Qué están discutiendo?’ Ellos (los Compañeros) dijeron: ‘Discutimos sobre la Hora’. Entonces, él dijo: ‘No vendrá hasta que aparezcan diez señales previas’. Y (al respecto) mencionó el humo, el Falso Mesías, la bestia, la salida del sol desde el oeste, la segunda venida de Jesús hijo de María (la paz sea con él), Gog y Magog, y deslizamientos de tierra en tres lugares, uno en oriente, otro en occidente y uno en Arabia, al final de los cuales un fuego arderá desde Yemen y conducirá a la gente al lugar de su reunión”.
Muslim también registró en su Sahih:
El Mensajero de Dios dijo: “La Hora no vendrá hasta que aparezcan diez señales: un deslizamiento de tierra en el oriente, y un deslizamiento de tierra en el occidente, y un deslizamiento de tierra en la península de Arabia, el humo, el Falso Mesías, la bestia de la tierra, Gog y Magog, la salida del sol desde el occidente y el fuego que se iniciará y expanderá desde la parte inferior de Adén”. Se narra de Abu Sariha, un Hadiz como este en el que el Mensajero de Dios no mencionó (la décima señal) pero dijo que uno de los diez era el descenso de Jesús, hijo de María (la paz sea con ellos); y en otra versión es un violento soplo de viento que conduciría a la gente del mar.
Hay otro par de Hadices en los que el Profeta menciona algunos de los mismos eventos anteriores. En estos Hadices, no los menciona como señales específicas de la Hora. En su lugar, el Profeta dio una fuerte advertencia y una alerta de que la gente debe realizar sus buenas obras antes de que ocurran estos eventos, pues ellos anuncian directamente el final del tiempo de las obras y el inicio del tiempo del ajuste de cuentas. Abu Huraira narró que el Mensajero de Dios dijo:
“Apresúrense a hacer buenas obras antes que seis cosas sucedan: la salida del sol por occidente, el humo, el Falso Profeta, la bestia y (la muerte) de uno de ustedes o la confusión general”. (Muslim)
Note que en este Hadiz el Profeta mencionó “la muerte de uno de ustedes”. Esto es también un tipo de “hora”. Aunque es interesante e importante aprender y conocer las Señales Mayores de la Hora, para los que no serán testigos de los eventos de los Últimos Días, es su hora —su muerte— para la que deben prepararse y sobre la que muchos son negligentes. Por eso, cuando un beduino se acercó al Profeta y le preguntó: “¿Cuándo es la Hora?”, el Profeta señaló a un muchacho y le dijo: “Si este muchacho vive, en el tiempo en que él sea viejo y decrépito, tu hora ya habrá tenido lugar”. (Sahih Al-Bujari)
El orden de aparición y la naturaleza de las Señales Mayores
Yusuf al-Waabil advierte que no ha encontrado ningún texto explícito que mencione el orden de aparición de las señales mayores del Día del Juicio. Los Hadices que mencionan las señales en un grupo, como aquellos mencionados arriba, utilizan las conjunciones “y” o “o”. En ningún caso estas conjunciones dan alguna indicación concreta en cuanto al orden cronológico de los eventos. De hecho, como indica Al-Waabil, algunos de los mismos Hadices mencionan los eventos en diferente orden.[1]
Ibn Hayar, sin embargo, ha dividido las Señales Mayores en dos categorías principales, una ocurriendo definitivamente antes que la otra.[2] El primer grupo de señales es aquel que ocurre en esta tierra, sin que la naturaleza de esta tierra cambie completamente. Estas son señales que claramente deben despertar a la gente y llevarla al arrepentimiento ante Dios. Durante estas señales, no hay en última instancia una distinción entre el creyente y el incrédulo ni hay ninguna incidencia incuestionable en esta creación que haga evidente que la Resurrección está cerca. Las señales de esta categoría incluyen la venida del Falso Mesías (Anticristo), el regreso de Jesús, Gog y Magog y los deslizamientos de tierra.
La segunda categoría de estas Señales Mayores no deja duda alguna de que está ocurriendo la Resurrección y el fin de esta Creación como los humanos la conocemos. Además, habrá una distinción entre los creyentes y los incrédulos. Por lo tanto, durante y después de estas señales, no habrá posibilidad de arrepentimiento o de regresar a Dios. En ese momento, será demasiado tarde para que cualquier arrepentimiento sea aceptado por Dios. Las señales en esta categoría incluirán la aparición de la bestia, el humo y la salida del sol desde el occidente.
También, parece cierto que cuando estas señales comiencen a suceder, una seguirá a la otra a un ritmo relativamente rápido.[3] El Profeta dijo:
“Las señales deberán aparecer una tras otra, así como los eslabones en una cadena se suceden uno a otro”.[4]
Ahmad registró en su Musnad que el Profeta dijo:
“Las señales son como cuentas ensartadas en una cuerda. Si la cuerda se rompe, ellas (rápidamente) siguen una a la otra”
Haremos una breve exposición sobre cada una de las Señales Mayores señaladas por el Profeta, la paz y las bendiciones de Dios sean con él, en el Hadiz mencionado.[1] Obviamente, en la medida que esta es una exposición relativa a cuestiones del oculto (Ghaib)” –esto es, cuestiones que los humanos aún no hemos atestiguado ni experimentado–, gran parte de la misma estará restringida exactamente a lo que ha sido mencionado en los textos del Corán o de la Sunnah.
Al-Dayyal (El Falso Mesías)
Son numerosos los Hadices del Profeta que tratan de la venida del Dayyal o Falso Mesías.[2] Estos Hadices demuestran que esta persona será una gran prueba y tentación para todos los humanos, creyentes o no. Por ejemplo, el Profeta mencionó que todos los profetas anteriores también advirtieron a su gente sobre la venida del Dayyal. El Profeta dijo:
“No hubo un profeta que no advirtiera a su nación sobre el mentiroso tuerto (el Dayyal)”. (Sahih Al-Bujari)
Además, el Profeta, como consta en Hadices auténticos, acostumbraba buscar refugio en Dios, durante sus oraciones, de la tribulación del Falso Mesías.
Diversos Hadices del Profeta proveen gran cantidad de información sobre el Dayyal. El Profeta, por ejemplo, aclara bien que se trata de un ser humano.[3] En general, el verdadero creyente no debe ser engañado por el Dayyal, puesto que el Profeta ha dado una descripción tan clara de él que hay muy poca oportunidad para que engañe a un creyente. Sin embargo, esto enfatiza la importancia del conocimiento en el Islam. Si alguien ignora por completo cómo describió el Profeta al Dayyal, no sería sorprendente que pueda caer en algunos de los trucos y engaños de este ser malvado.
Los numerosos Hadices sobre el Dayyal contienen una descripción de sus características físicas. Estos Hadices incluyen:
Muslim registró que Ibn Umar narró que el Mensajero de Dios hizo una mención al Dayyal en presencia de la gente y dijo: “Dios no es tuerto y he aquí que el Dayyal es ciego del ojo derecho y su ojo es como una uva flotante”.
En otro Hadiz registrado por el Imán Muslim y otros, el Profeta dijo: “Habrán tres letras (árabes) escritas: Kaaf[4] Faa[5] Raa,[6] estas tres letras en este orden forman la base de la palabra árabe “Kafir” que significa incrédulo, entre los ojos del Dayal”. En otro Hadiz, el Profeta declaró que todo musulmán será capaz de leer estas letras.
El Profeta también describió algunas de las cosas que vendrían con el Dayyal. Por ejemplo, el Imam Muslim registró que el Profeta dijo:
“El Dayyal tendrá con él agua y fuego, y su fuego tendrá el efecto del agua fría y su agua tendrá el efecto del fuego, así que no te expongas a la ruina”.
Hudaifa, compañero del Profeta, igualmente declaró: “Sé más que ustedes sobre lo que habrá junto con el Dayyal. Habrá con él dos canales (en uno fluirá agua) y el otro (tendrá) fuego (dentro), y lo que se vea como fuego será agua y lo que se vea como agua será fuego. Así que, quien de ustedes sea capaz de ver eso y esté sediento, deberá beber lo que vea como fuego”. (Muslim)
Como ocurre con todos los impostores religiosos, aquellos que son conscientes de la verdad serán capaces de ver detrás de sus planes y trucos sorprendentes. El siguiente Hadiz hace este punto muy claro. Abu Said al-Judri informó que el Mensajero de Dios dio un día una relación detallada del Dayyal, y en ella mencionó lo siguiente:
“Vendrá, pero no le será permitido entrar por los pasos de la montaña hacia Medina. Así que se detendrá en algunas zonas de tierra (que contienen altas concentraciones de sal y donde se producen filtraciones que las hacen estériles) adyacentes a la ciudad de Medina, y una persona saldrá (a donde el Dayyal) y le dirá: ‘Doy testimonio de que eres el Dayyal sobre el que el Mensajero de Dios (la paz sea con él) nos informó’. El Dayyal dirá entonces (a sus seguidores): ‘Cuál sería su opinión si matara a esta persona y luego lo trajera de nuevo a la vida, ¿aún así albergarían alguna duda sobre este asunto?’ Ellos le responderán: ‘No’. Entonces, él matará (al hombre) y luego lo traerá de nuevo a la vida. Cuando traiga a esa persona de regreso a la vida, ésta dirá: ‘Por Dios, no hay mejor prueba del hecho (que eres el Dayyal) que lo que acabas de hacer’. El Dayyal intentará entonces matarlo (de nuevo), pero no será capaz de hacerlo”
Uno de los muchos aspectos que uno aprende a través de la historia del Dayyal es que las riquezas mundanas y los logros no son los que determinan la importancia y el valor de una persona. De hecho, una persona puede poseer todo lo que el mundo contiene, sin embargo, si carece de fe en su corazón, verdaderamente no vale nada. Por ello, otro Hadiz en Sahih Muslim dice lo siguiente:
Al Muguira ibn Shu’ba declaró: “Nadie le preguntó al Mensajero de Dios, que la paz y la misericordia de Dios sean con él, más acerca del Dayyal que yo. Él me dijo: ‘Él no debería ser fuente de preocupación para ti pues no sería capaz de lastimarte’. Dije: ‘Mensajero de Dios, se dice que él tendría consigo (abundancia de) comida y agua’. Entonces, él dijo: ‘Él (el Dayyal) y su habilidad para confundir a los creyentes con lo que Dios ha permitido que sea creado por sus manos (por ejemplo, grandes cantidades de comida y agua), serían insignificantes en comparación con la habilidad de Dios de hacer de estos eventos una fuente para incrementar la fe de los creyentes’”.
En Sahih Muslim también están mencionados algunos Hadices en los que el Profeta establece:
“No habrá tierra por la que el Dayyal no pase o atraviese excepto por La Meca y Medina, y cada uno de los pasajes que conducen a ellas estará protegido por ángeles ordenados en filas. Entonces, él (el Dayyal) aparecerá en algunas zonas de la tierra (que contienen altas concentraciones de sal y en donde se producen filtraciones que las hacen estériles) adyacentes a la ciudad de Medina y ésta (Medina) se sacudirá con tal violencia que todo incrédulo e hipócrita saldrá de ella e irá hacia él (el Dayyal)”.
El Profeta también describió a los seguidores del Dayyal cuando dijo:
“El Dayyal será seguido por setenta mil judíos de Isfahán vestidos con mantas persas”.
El siguiente Hadiz de Sahih Muslim da una descripción más detallada de las acciones fuera de lo común que realizará el Dayyal y lleva directamente a la manifestación de la siguiente señal mayor del Día del Juicio: el regreso de Jesús:
An-Nawás ibn Sam’an informó que el Mensajero de Dios hizo una mención del Dayyal un día en la mañana. A veces lo describió como insignificante y a veces describió (su agitación) como muy importante y sentimos como si estuviera entre las palmeras de dátiles. Cuando fuimos a él (el Profeta) por la noche y leyó (las señales de miedo) ante nosotros, dijo: “¿Qué les ocurre?’ Dijimos: “Mensajero de Dios, mencionaste al Dayyal por la mañana (a veces describiéndolo) como insignificante y a veces como muy importante, hasta que empezamos a pensar que él estaba presente en alguna parte (cercana) del grupo de palmeras”. Entonces dijo: “No albergo temor en relación a ustedes en muchas otras cosas además del Dayyal. Si viene avanzando mientras estoy con ustedes, lucharé contra él en vuestro nombre; pero si viene avanzando mientras no estoy con ustedes, un hombre debe luchar en su propio favor y Dios cuidará de cada musulmán en mi nombre (y lo protegerá contra su maldad). Él (el Dayyal) será un hombre joven con cabello muy rizado y un ojo ciego. Lo comparo con Abdul Uza b. Qatan. Aquel de entre ustedes que sobreviva a verlo, debe recitar sobre él los versículos de apertura de la Sura Al-Kahf. Él aparecerá en el camino entre Siria e Irak y esparcirá el mal a diestra y siniestra. ¡Oh siervo de Dios! Apégate (al camino de la Verdad)”. Dijimos: “Mensajero de Dios, ¿cuánto estará él en la tierra?” Dijo: “Por cuarenta días, un día como un año y un día como un mes y un día como una semana y el resto de los días serán como sus días (normales)”. Dijimos: “Mensajero de Dios, ¿las oraciones de un día serán suficientes para las oraciones de un día igual a un año?” Entonces, dijo: “No, pero ustedes deberán hacer un estimado de tiempo (y luego cumplir la oración)”. Dijimos: “Mensajero de Dios, ¿qué tan rápido caminará él por la tierra?” Entonces, dijo: “Como una nube impulsada por el viento. Él irá con la gente y la invitará (a una religión equivocada) y ellos afirmarán su fe en él y responderán a él. Luego, él le dará una orden al cielo y habrá lluvia sobre la tierra y crecerán los cultivos. Entonces, en la noche, sus animales de pastoreo vendrán a ellos con sus jorobas muy altas, sus ubres llenas de leche y sus flancos extendidos. Entonces, él irá con otra gente y los invitará. Pero ellos lo rechazarán, él se alejará de ellos y habrá sequía para ellos y nada quedará con ellos en forma de riqueza. Luego, él caminará por la tierra yerma y le dirá: ‘Produce tus tesoros’, y los tesoros saldrán y se recogerán (a sí mismos) ante él como el enjambre de abejas. Él llamará entonces a una persona rebosante de juventud, lo atacará con la espada, lo cortará en dos partes y (hará que estas partes descansen a una distancia similar a la que hay) entre el arquero y su blanco. Entonces, llamará (al hombre joven) y él se presentará riendo, con su rostro resplandeciente (de felicidad), y será en ese instante que Dios enviará a Jesús, hijo de María…