Alabado sea Dios.

Los eruditos han mencionado diferentes tipos de profanación de los nombres de Dios, glorificado y exaltado sea, todos los cuales implican distorsionar sus significados, dando a entender por ellos algo distinto al significado original. Aquí hay varios tipos: 

1 – Negar cualquiera de Sus nombres o el atributo al cual el nombre refiere. Por ejemplo, aquellos que niegan que Dios sea ‘Ar-Rahmán’ (El Misericordiosísimo), glorificado y exaltado sea, como hacía la gente de la ignorancia preislámica. O pueden afirmar el nombre pero negar el atributo al cual refiere, como algunos innovadores dicen, que Dios, glorificado y exaltado sea, es Misericordioso pero sin misericordia, o Omnioyente pero sin oír. 

2 – Invocar a Dios, glorificado y exaltado sea, por un nombre por el cual Él no se llamó a Sí mismo.

La razón por la cual esto es una profanación es que los nombres de Dios, glorificado y exaltado sea, son los que están mencionados en los textos del Corán y la Tradición Profética, y no es permisible invocar a Dios, glorificado y exaltado sea, por nombres con los que Él mismo no se llamó. Esto cae bajo la denominación de hablar sobre Dios sin conocimiento y transgredir Sus derechos. Es algo que algunos filósofos occidentales y los cristianos hicieron, cuando llamaron a Dios “padre”. 

3 – Creer que estos nombres o atributos son algo compartido por sus criaturas, y asumir que Dios es similar a Su creación. 

La razón por la cual esto es una profanación es que quien cree que los nombres de Dios, glorificado y exaltado sea, indican que Él es igual a Su creación están en un error, y ese no es el significado correcto del Mensaje de Dios. Afirmar que Dios es igual a su creación es una de las creencias de los incrédulos, por lo que se entiende de las palabras de Dios y de las palabras de Su Mensajero (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Dios dijo (traducción del significado): 

“No hay nada ni nadie semejante a Dios, pues Él es Omnioyente, Omnisciente” (Ash-Shurah, 42:11). 

“Es el Señor de los cielos, de la Tierra y de cuanto hay entre ellos. Adórale, pues, y persevera en Su adoración. ¿Conoces a alguien similar a Él?” (Mariam 19:65). 

Na’ím ibn Hammád al-Juzá’i, el shéij del imam Al-Bujari (que Allah tenga misericordia de ambos) dijo: “Quien cree que Dios tiene las cualidades de Su creación ha cometido un acto de incredulidad, y quien niega algún atributo de los que Él mismo se ha atribuido, también; no hay nada en los atributos con que Dios se describió a Sí mismo que sea igual a lo de Su creación. 

4 – Derivar nombres para los ídolos de los nombres de Dios, glorificado y exaltado sea, como hicieron los árabes preislámicos al llamar a sus ídolos como Al-Lat (la diosa), ‘Al-‘Úzza (el poderoso), o Manat (benefactora)”. Fin de la cita 

Shéij Muhámmad Ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él).