Alabado sea Dios.

Conocer los bellos nombres de Dios ciertamente es muy importante, por las siguientes razones:

Sus bellos nombres están relacionados con Sus atributos, que son lo mejor y lo más noble del conocimiento, porque el nivel de honor alcanzado en cada tipo de conocimiento tiene que ver con el sujeto a conocer, y el sujeto a conocer en este caso es Dios, glorificado y exaltado sea, a través de Sus nombres, actos y atributos. Buscar el conocimiento y estudiarlo es ciertamente una de las más altas metas en la vida, y adquirir este conocimiento es uno de los mejores dones que una persona puede tener. El Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) lo explicó muy claramente, y sus compañeros nunca disputaron acerca de este asunto. 

Conocer los nombres de Dios hace que una persona Lo ame y Le tema, y ponga su confianza en Él, y sus acciones sean más sinceras. Esta es la esencia de la felicidad humana. No hay camino para conocer a Dios excepto conocer Sus atributos contenidos en Sus bellos nombres, y comprender apropiadamente sus significados. 

Conocer los nombres de Dios, entonces, incrementa nuestra fe, como dijo el shéij ‘Abd er-Rahmán Ibn Sa’id (que Allah tenga misericordia de él):

“Conocer los nombres de Dios y creer en ellos incluye tres tipos de fe en la unidad absoluta de Dios: la unidad absoluta de Su señorío divino (tawhid ar-rububíyah), la unidad absoluta de Su divina naturaleza (tawhid al-uluíyah), y la unidad absoluta de Sus divinos nombres y atributos (tawhid al-asma' wa as-sifat). Estos tres tipos de unicidad forman la esencia y alegría de la fe, pues este conocimiento es la base y propósito de la fe. Cuanto más conoce el musulmán acerca de los nombres y atributos de Dios, más se incrementa su fe y sus convicciones religiosas se vuelven más fuertes”. Fin de la cita de At-Tawdih wa al-Baián li Shayarat al-Imán, por As-Sa’di, pág. 41. 

Dios creó a todas las criaturas para que Lo conozcan y Lo adoren. Esto es lo que Dios espera de ellas y lo que les pide. Ibn al-Qayím (que Allah tenga misericordia de él) dijo:

“La clave de la llamada de los mensajeros, la esencia de sus mensajes, es conocer a Dios a través de Sus nombres, actos y atributos, porque este es el fundamente en el cual descansa el Mensaje, desde principio a fin”. Fin de la cita de Al-Sawa’iq al-Mursalah ‘ala al-Yahmíyah wa al-Mu’áttilah, por Ibn al-Qayím, 1/150-151. Por lo tanto, cuando una persona se preocupa por aprender acerca de Dios, está cumpliendo la misión para la cual fue concebido. Pero si ignora este asunto está descuidando la esencia de su función. Este es el significado de la fe, la fe no es simplemente pronunciar palabras sin conocimiento, la verdadera fe en Dios significa conocer a Dios, en Quien uno cree, y hacer un esfuerzo por aprender acerca de Sus cualidades y divinos nombres. Cuanto más aprendemos acerca de Dios, mayor es nuestra fe. 

El conocimiento de los nombres de Dios es la base de todo otro tipo de conocimiento. Ibn al-Qayím dijo:

“El conocimiento de los bellos nombres de Dios es la base de todo otro conocimiento, porque detrás de todo lo que Dios ha creado está el plan del Creador. Las razones para la obra de Dios pueden encontrarse en Sus divinos nombres y atributos, porque Él es el Creador, Él ha creado todas las cosas, Él es Quien nos guía al camino recto, etc. Conocer Sus bellos nombres y atributos es la base de toda forma de conocimiento, porque todo el conocimiento parte de estos atributos contenidos en Sus bellos nombres”. Fin de la cita de Bada'i al-Fawa'id por Ibn al-Qayím, 1/163. Ver también: Asma' Allah al-Husna, pág. 6-8. 

Y Allah sabe más.