Términos árabes

·       Shirk: Palabra que implica asociar copartícipes con Allah o conferir atributos divinos a otro que no sea Allah; o creer que la fuente de poder, daño y bendiciones viene de otro distinto de Allah.

·       Tawhid: La Unidad y Unicidad de Allah con respecto a Su Señorío, Sus nombres y atributos, y Su derecho a ser adorado.

·       Sunnah: La palabra Sunnah tiene varios significados según el área de estudio; sin embargo, el significado que generalmente se le atribuye es: palabras, acciones y aprobaciones del Profeta.

Introducción


La palabra árabe shirk [1] es lo contrario del Tawhid, la Unidad y Unicidad de Allah, y es más amplia que politeísmo e idolatría. El shirk contradice el propósito mismo de la creación como está expresado en el Corán:

“No he creado a los yinnes y a los seres humanos sino para que Me adoren” (Corán 51:56).

Los profetas fueron enviados con la misión de erradicar el shirk y para invitar a la humanidad a adorar únicamente a Allah.

¿Qué es el shirk?


El shirk es asociar a alguien distinto de Allah en aquellos aspectos que son únicos de Allah y que son Su derecho exclusivo. El shirk es adorar a seres creados como se adora a Allah, venerar a seres creados como solo Allah debe ser venerado, y atribuirle parte de Su divinidad a alguien más.

Gravedad del shirk


No hay ningún asunto sobre el cual el Islam sea tan estricto como el del Tawhid (monoteísmo). Por lo tanto, el shirk es considerado la mayor violación con la que se desafía al Señor de los cielos y de la Tierra. La gravedad del shirk se puede resumir en los siguientes puntos:

(1)  El shirk iguala al Creador con Su creación, en el sentido de que los asuntos que son exclusivos de Allah le son asociados a otros que no tienen derecho a ello. Por lo tanto, Allah declara que el shirk es el mayor mal:

“El shirk es una gran injusticia” (Corán 31:13).

(2)  Allah ha declarado que Él no perdona el pecado del shirk a menos que la persona se arrepienta de él:

“Dios no perdona el shirk, pero fuera de ello perdona a quien Le place. Quien asocie algo a Dios comete un pecado gravísimo” (Corán 4:48).

(3)  Allah les ha prohibido el Paraíso a quienes no se arrepientan de haber cometido shirk, condenándolos al Infierno por toda la eternidad:

“A quien atribuya actos de adoración a otros además de Dios, Él le vedará el Paraíso y su morada será el Infierno. Los injustos no tendrán quién los socorra” (Corán 5:72).

(3)  Todas las buenas obras que una persona puede haber hecho se pierden, se invalidan, y se hacen vanas si la persona muere sin arrepentirse del shirk:

“Se te ha revelado [¡oh Muhammad!], y también a los [Profetas] que te precedieron, que si dedicas actos de adoración a otro que Dios, tus obras se perderán y te contarás entre los perdedores” (Corán 39:65).

(4)  El shirk es el más mortal de todos los pecados mayores. En una ocasión, el Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) les preguntó a sus compañeros si ellos sabían cuál era el mayor de los pecados principales. Luego les explicó:

“Los principales pecados son: El shirk, no ser amable con los padres…” (Sahih Al Bujari, Sahih Muslim).

Tipos de shirk


(1)  Shirk mayor (Shirk akbar)

(2)  Shirk menor (Shirk asghar)

Definición de shirk mayor


El shirk mayor es asociar a otros con Allah en aquellos aspectos que son únicos de Allah en Su persona, tomando a un rival o un asociado junto a Allah y haciéndolo un igual de Allah.

Shirk en Allah como Señor


Esta categoría incluye:

(i)   Ateísmo (la creencia de que los seres humanos no tienen un Señor).

El Faraón negó la existencia de Allah y se autoproclamó Señor sobre Moisés y el pueblo de Egipto. Le anunció a la gente:

“Yo soy su Señor supremo” (Corán 79:24).

Los filósofos de la actualidad que niegan la existencia de Allah o los científicos que consideran que el universo se creó a sí mismo o que no tiene principio ni final, entran en esta categoría. También, la idea de que la naturaleza es Dios en sí misma, o que Dios mora dentro de Su creación, también es shirk.

(b)  La creencia de que Allah comparte Su gobierno y control sobre Su creación.

La gente que entra en esta categoría puede creer en los poderes y habilidades de Allah, pero también cree que Allah es varias “personas”, que Él está, de algún modo, “dividido” en diferentes seres. Un ejemplo son los cristianos que creen que Allah es Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, todos a la vez. Los hindús también creen en Un Dios que toma las formas de Brahma (el Creador), Vishnu (el Preservador) y Shiva (el Destructor). El Islam enseña que Allah es Uno en todos los sentidos y aspectos: perfecto, indivisible y completo.

Otro ejemplo de este shirk es el de aquellos que les rezan a los muertos. Ellos creen que las almas de los santos y otras personas pueden inmiscuirse en los asuntos de los mortales, que las almas de los difuntos pueden, de algún modo, causar un cambio en las vidas de las personas, respondiendo sus súplicas o de otras maneras. La verdad es que los muertos no tienen poder sobre los seres vivos, ellos no pueden responder las súplicas de nadie ni proteger a nadie ni otorgar deseos.

El shirk mayor: Shirk en los nombres y atributos de Allah


Creer que Allah es como la creación o que la creación es como Allah es la esencia del shirk en los nombres y atributos de Allah. Se puede clasificar, además, en dos tipos:

(i)   Humanizar a Allah al creer que tiene atributos similares a los humanos es shirk. Las representaciones de Dios en pinturas y esculturas entran en este tipo. El cristianismo, la mayor religión de Occidente, ve a Dios en términos humanos, pues consideran que Jesús es Dios encarnado, por eso es natural que se produzcan cosas como las representaciones de Miguel Ángel del rostro y la mano de Dios en pinturas. Los hindúes adoran innumerables ídolos como las formas de Dios. Por el contrario, la tradición musulmana ha sido clara en este punto, pues el Corán enseña claramente:

“No hay nada ni nadie semejante a Dios, y Él todo lo oye, todo lo ve” (Corán 42:11).

(ii)  Otra forma de este tipo de shirk es cuando los seres humanos son definidos dándoles nombres o cualidades divinos. Por ejemplo, los cristianos elevan a María, la madre de Jesús, al estatus divino al asignarle algunos de los atributos de Allah, como el Misericordioso. También llaman a María la Madre de Dios, y con "Dios" hacen referencia a su hijo Jesús. A este último lo llaman el "Dios Vivo", "el Primero y el Último", que son nombres reservados únicamente a Allah. El Mensajero de Allah (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo:

“Allah Todopoderoso ha dicho: ‘El ser humano… Me injurió y no tenía derecho a hacerlo… Su injuria hacia Mí es su afirmación: 'Allah ha tomado para Sí un hijo', mientras que Yo soy el Único, el Refugio Eterno. No engendré ni fui engendrado, y no hay nada comparable a Mí’” (Sahih Al Bujari, An-Nasa'i).

El shirk mayor: Shirk en el derecho de Allah a ser adorado


En esta categoría de shirk, los actos de adoración son dirigidos a otro distinto de Allah y la recompensa por la adoración se busca en la creación en lugar de en el Creador. Orar, inclinarse y prosternarse son actos de adoración reservados solo para Allah.

“Cuando suben a un barco [y son azotados por una tempestad] invocan solo a Dios con sinceridad, pero cuando los pongo a salvo llevándolos a la costa, vuelven a dedicar actos de adoración a sus ídolos” (Corán 29:65).

Ejemplos de shirk en el derecho de Allah a ser adorado


(1)  Amar a Allah correctamente es adorarlo solo a Él. Una forma de shirk mayor es darle a alguien una parte del amor reservado para Allah. Él es el Único amado por Su propia causa. Dos cosas amadas por su propia causa no pueden coexistir en un mismo corazón. El amor a Allah es diferente del amor a los padres, al cónyuge o a los hijos, ya que se combina con un sentimiento de Su santidad y de temor a Él, y lleva a la persona a suplicarle, confiar en Él, tener esperanza en Su misericordia, temer Su castigo, y adorarlo únicamente a Él. Amar a otros como debe ser amado Allah es shirk en el amor. Un musulmán no debe estar atado a nada al punto de que ello esclavice su corazón. Los corazones se apegan al poder, al dinero, al lujo, a las mujeres, a la música, a las drogas y al alcohol, por nombrar solo algunas cosas. Esas cosas se pueden convertir en "dioses" en la vida de una persona, y esta las persigue día y noche, y una vez obtiene aquello que ama trabaja arduamente para complacerlo. Es por esto que el Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) le dijo a una mujer que adoraba el dinero que siempre sería miserable[1] y el Corán dice:

“Existen personas que toman en lugar de Dios a otros que consideran iguales [a Dios], y los aman como solo debe amarse a Dios; pero los creyentes aman más a Dios [de lo que estos aman a sus divinidades]” (Corán 2:165).

(2)  Shirk en la súplica. Primero, la súplica o invocación (conocida en árabe como du’a) es parte de la adoración, pues el Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo:

“La súplica es la esencia de la adoración” (Abu Dawud, At-Tirmidhi, Ahmad).

Pedir ayuda a los santos, a hombres justos fallecidos o ausentes es shirk mayor, ya que solo debemos buscar esa ayuda en Allah. Esto incluye rezar, invocar o suplicar a deidades falsas, profetas, ángeles, santos, ídolos, o a cualquiera distinto de Allah. Los cristianos le rezan a un hombre, el Profeta de Allah, Jesús, a quien consideran "Dios encarnado". Los católicos les rezan a los santos, a los ángeles y a María como la “madre de Dios”. También es shirk rezarle al Profeta Muhammad o a hombres virtuosos fallecidos creyendo que ellos pueden responder las súplicas, pues dice Allah:

“Diles: 'Me fue prohibido adorar aquello que invocan en lugar de Dios'” (Corán 6:56).

“Y jamás invocar en vez de Dios lo que no puede beneficiarme ni perjudicarme, porque si lo hiciera sería de los injustos” (Corán 10:106).

“Si ustedes los invocan, no oyen su invocación, y si oyeran no podrían responder. El Día de la Resurrección negarán que los hayan adorado, y no te informará nadie como Dios, Quien está bien informado de todo” (Corán 35:14).

(3)  Shirk en la obediencia. Allah es el Único Gobernante de los asuntos de los seres humanos. Allah es el Legislador Supremo[2] y el Juez Absoluto. Él distingue el bien del mal. Así como el mundo físico se somete a su Señor, los seres humanos deben someterse a las enseñanzas morales y a la religión de su Señor, el Señor que separa el bien del mal para ellos. En otras palabras, solo Allah tiene la autoridad de hacer leyes, determinar actos de adoración, decidir la moral y establecer estándares de interacción y comportamiento humanos. Suya es la orden:

“Él es Quien dictamina las órdenes según Él quiere” (Corán 7:54).

“El juicio solo pertenece a Dios, Quien ordenó que no adoren a nada ni nadie excepto a Él; esa es la religión verdadera, pero la mayoría de la gente lo ignora” (Corán 12:40).

Obedecer a los líderes religiosos en asuntos de clara desobediencia a Allah es una forma de shirk mayor, pues Allah dice:

“Tomaron [los judíos] a sus rabinos y [los cristianos] a sus monjes y al Mesías, hijo de María, por divinidades en lugar de Dios” (Corán 9:31).

Pusieron socios junto a Allah, no rezándoles directamente, sino aceptando voluntariamente que sus rabinos y clérigos cambiaran lo lícito por ilícito y lo prohibido por legal en la religión de Allah. Les dieron a sus hombres religiosos la autoridad que solo tiene Allah: establecer la ley divina. Por ejemplo, el Papa de la Iglesia Católica Romana tiene la autoridad de determinar cómo debe ser adorado Dios. Él tiene autoridad total para interpretar, cambiar y cancelar tanto sus propias leyes como las establecidas por los papas anteriores, y determina el servicio litúrgico y el ayuno.

(4)  Hacer un juramento por alguien distinto de Allah.

(5)  Sacrificar un animal para venerar o complacer a alguien distinto de Allah, por ejemplo, a un santo.

(6)  Circunvalar las tumbas de los santos. Inclinarse o prosternarse ante personas o ante tumbas.

(7)  Temer a otros seres como solo Allah debe ser temido en cuanto a ser afligido con un castigo.

(8)  Buscar ayuda sobrenatural y apoyo de otros distintos a Allah en lo que ellos no tienen capacidad de proporcionar, como pedirles ayuda a los ángeles o a los santos.

(9)  Hacer de alguien un "intermediario" (intercesor) entre uno y Allah, rezándole y confiando en él.

Definición de shirk menor


El shirk menor es lo que ha sido llamado específicamente shirk en el Corán y la Sunnah, pero no alcanza el nivel del shirk mayor. Algunos eruditos han dicho que el shirk menor es tan vasto, que es difícil definirlo con precisión. Los ejemplos más importantes de shirk menor son:

Amuletos y presagios


Usar dijes, amuletos y talismanes para protegerse contra el mal de ojo, la mala suerte y similares, creyendo que Allah ha puesto estos poderes en ellos, constituye shirk menor. Esto se discute en mayor detalle aquí.

Hacer un juramento en nombre de otro distinto de Allah


Hacer un juramento o prometer en nombre de alguien distinto de Allah es un tipo de shirk menor, siempre que la persona no tenga la intención de venerar a aquel en cuyo nombre está prestando juramento, de lo contrario se convierte en shirk mayor. El Mensajero de Allah (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo:

“Aquel que jura en el nombre de otro distinto de Allah comete incredulidad o shirk”[1].

Riya (presumir)


El Mensajero de Allah dijo:

“Lo que más temo para ustedes es el shirk menor”.

Le dijeron: “¡Oh, Mensajero de Allah, ¿qué es el shirk menor?”. Contestó:

“Riya (presumir), porque Allah dirá en el Día en que las personas serán recompensadas por sus actos: ‘Vayan con aquellos para quienes exhibieron sus hazañas en el mundo, y vean qué recompensa encuentran con ellos’” (Ahmad).

Riya es realizar adoración con el fin de ser visto y alabado por la gente. Riya hace que una obra sea nula, y la persona gana el pecado en lugar de la recompensa de Allah, y se expone al castigo.

A los seres humanos, por naturaleza, les gusta ser elogiados, no les gustan las críticas, y no quieren verse deficientes en modo alguno. El Islam considera que hacer actos religiosos para impresionar a otros en lugar de complacer a Allah ―es decir que lo que debería hacerse por Allah se hace por la gente― es shirk. El Mensajero de Allah dijo:

“Allah (glorificado y exaltado sea) dijo: ‘Soy tan autosuficiente que no necesito tener un asociado. Por lo tanto, quien realice un acto por la causa de otro, así como por la Mía, hará que Yo renuncie a ese acto por aquel a quien asoció conmigo’” (Sahih Muslim).

Hay una buena posibilidad de que un creyente caiga en la riya porque esta se encuentra oculta en su corazón, contamina la intención, y la persona tiene que estar extremadamente atenta para corregirla. Ibn 'Abbas, uno de los compañeros del Profeta, dijo:

“El shirk en la nación musulmana está más oculto que una hormiga negra que se arrastra sobre una piedra negra en medio de una noche sin luna”[2].

La intención es un asunto simple, pero a veces puede ser difícil cambiarla. Una persona tiene que escuchar su corazón y ver qué motiva una acción determinada. Un musulmán tiene que observar cuidadosamente su intención para mantenerla pura cada vez que realiza una buena obra, como la oración ritual, dar caridad, ayunar, servir a sus padres o incluso sonreír. Quizás es por eso que decir el nombre de Allah haya sido prescrito antes de todos los actos importantes en la vida diaria (comer, beber, dormir, ir al baño, despertarse e irse a dormir). Recordar a Allah mantiene el corazón consciente de Allah y la intención pura.

Entendamos, con unos ejemplos simples, cómo la riya puede afectar la adoración:

(a)  Digamos que el motivo básico cuando te pones de pie para orar es que la gente te vea o note que estás orando, deseando ser alabado. Eso invalida el acto de adoración.

(b)  Digamos que comenzaste a orar con sinceridad, tu intención era orar por Allah, pero luego comenzaste a pensar en complacer a la gente y, poco a poco, tu intención cambió. Haces una de dos cosas. Si resistes la tentación de ser notado, no tendrá efecto en ti, porque el Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: "Allah ha perdonado a mi Ummah por lo que cruce por sus mentes, siempre y cuando no lo digan ni lo lleven a la práctica". Pero si no haces nada y no resistes la tentación de hacer el acto de adoración de modo que puedas ser notado, y comienzas a embellecer tu salah para que se note, todo el acto de adoración puede quedar invalidado.

(c)  El elogio que no es buscado no es perjudicial. Se le preguntó al Profeta acerca de eso y dijo: "Esa es la primera albricia para el creyente". No es presumir si la persona se siente feliz porque ha hecho un acto de adoración, en realidad, es una señal de su fe. El Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo:

“Quien se sienta feliz por sus buenas obras y triste por sus malas acciones, ese es el creyente”.

El Profeta nos ha proporcionado palabras de protección contra ese shirk poco visible, que podemos decir en cualquier momento del día. En una ocasión, el Profeta pronunció un sermón diciendo:

"¡Gente!, teman el shirk, porque está más oculto que el arrastre de una hormiga" (At-Tabarani).

Algunos preguntaron: "¿Y cómo lo evitamos, si está más oculto que el arrastre de una hormiga, Mensajero de Allah?". Él les contestó: “Digan:

‘Al-lah-humma inna na-udzu-bika an nush-rika bika shai-ann naa-lamu, wa nas-tagh-fi-ruka limaa laa naa-lam’.

(¡Oh Allah!, buscamos refugio en Ti de cometer shirk Contigo a sabiendas, y buscamos Tu perdón por lo que hacemos sin saber)[3]

Diferencias entre shirk mayor y shirk menor


(1)  Ambos se definen de manera diferente.

(2)  El shirk mayor expulsa a la persona de las filas del Islam, mientras que el shirk menor no, pero reduce la creencia de uno en Allah.

(3)  Una persona que muera cometiendo shirk mayor estará en el Infierno por toda la eternidad; este no es el caso de quien comete shirk menor.

(4)  El shirk mayor borra y anula todas las buenas obras, mientras que el shirk menor solo arruina las obras que son motivadas por él o de las cuales hace parte.

(5)  El shirk mayor no es perdonado por Allah sino solo a través del arrepentimiento sincero hecho antes de morir; en cambio, Allah decidirá si castigar o perdonar a alguien que cometió shirk menor.