Cuando una persona abraza el Islam o reafirma su fe, es un momento muy emotivo. Muchas personas encuentran que la experiencia es abrumadora y reaccionan de diferentes maneras. Algunos con silencio y tranquilidad, como si sostuvieran un objeto muy preciado. Otros están entusiasmados y quieren gritarlo desde los techos.

No es inusual sentir una variedad de emociones; la vida puede sentirse como una montaña rusa. A veces en subida, como si necesitaras aprender todo ahora y revelar tu nueva fe a los demás; a veces en bajada, cuando la ocasión trascendental se siente casi demasiado pesada como para cargarla.

Sin embargo, esos sentimientos son un microcosmos de toda una vida del Islam. Algunas veces tu nivel de fe es alto, otras veces es más bajo. Los primeros días, semanas o meses de tu nueva fe son algo así como un curso acelerado en la vida como musulmán.

Se presentan maravillosas oportunidades; tienes una nueva comprensión de las cosas que te han dejado perplejo o preocupado toda tu vida, y la sensación de estar envuelto en el amor de Dios es la experiencia más maravillosa que puedas imaginar.

Por otro lado, los problemas pueden levantar la cabeza muy rápidamente. Dios deja muy claro que la vida está llena de pruebas, dificultades y tribulaciones.

Los pondremos a prueba con algo de temor, hambre, pérdida de bienes materiales, vidas y frutos, pero albricia a los pacientes. Aquellos que cuando les alcanza una desgracia dicen: «De Dios provenimos, y a Él retornaremos [para que nos juzgue por nuestras acciones]». (Corán 2:155-156)

 Un problema es universal entre los recién llegados al Islam. ¿Cómo explicarás tus acciones a tu familia y amigos? Y este problema no está reservado para los nuevos conversos; También es problemático para aquellos que nacieron en la fe islámica pero que provienen de familias que son poco entusiastas sobre los puntos más delicados del Islam, o que son musulmanes solo de nombre.

Este dilema es uno de los primeros problemas con los que tendrás que lidiar; y en realidad es una lección sobre cómo lidiar con todas las complicaciones en la vida que se presentarán a partir de ahora. El Islam te equipa con la capacidad de resistir y resolver todos tus problemas y dificultades.

EL ISLAM TIENE UNA SOLUCIÓN

Estas situaciones difíciles, y a veces incómodas, se resuelven siguiendo la guía que se encuentra en el Corán y en las tradiciones, palabras y acciones del profeta Muhammad (PyB).

De ninguna manera eres la primera persona en estar en esta situación, de hecho, estás en compañía de muchos de los primeros conversos al Islam en tiempos del profeta Muhammad (PyB).

A medida que el Islam crecía, también lo hizo la cantidad de personas que enfrentaban la posibilidad de contarles a sus familiares y amigos. En muchas situaciones, los nuevos musulmanes temían por sus vidas y sus medios de vida, pero siempre actuaban de la manera que les habían enseñado Dios y el profeta Muhammad (PyB).

DUAA

La primera línea de defensa para un musulmán, ya sea que esté luchando contra Satanás, tratando de resolver un problema mundano o preocupado por su relación con familiares y amigos, es hacer duaa (súplica).

La duaa es un arma muy poderosa y puede usarse en momentos de tristeza o confusión, así como en momentos de felicidad. Es una forma de estar en contacto con Dios y pedirle que te guíe a través de todas las situaciones. Si no estás seguro de cómo hablar sobre tu Islam con familiares y amigos, la duaa es una forma útil de pedirle ayuda a Dios.

ESPERA TODO TIPO DE REACCIONES

Es importante recordar que puedes haber estado pensando en el Islam durante mucho tiempo. Cuando reveles tu decisión a tus amigos y familiares, es probable que te sorprenda.

A diferencia de ti, no han estado pensando en eso. Por lo tanto, no tiene sentido decepcionarse cuando no aceptan la idea con los brazos abiertos. Tu familia en particular necesita tiempo para incluir tu religión en su comprensión de ti y tu cosmovisión.

Por lo tanto, debes tomar las cosas con calma, un paso a la vez. Si tu familia y amigos no reaccionan de la manera que esperabas, trata de no ponerte a la defensiva; recuerda controlar tu enojo y no levantes la voz y no salgas de la habitación o de la casa.

También vale la pena recordar que las personas rara vez reaccionan de la manera esperada. Por ejemplo, si esperabas lágrimas y protestas, puede que no suceda; pero, por otro lado, las personas de las que esperabas apoyo a menudo no pueden aceptar los cambios, al menos no al principio.

MANTÉN LOS LAZOS FAMILIARES

Si cortar los lazos con tu familia se te cruzó por la mente, tendrás que repensar eso porque el Corán es muy claro, cortar los lazos de parentesco no solo es innecesario, sino que está mal.

Dios y el profeta Muhammad (PyB) nos dicen que mantener buenas relaciones con nuestros padres es la mejor manera de comportarse. Incluso si el impacto de tu conversión al Islam los ha alejado, se te exhorta a hacer todo lo posible para reparar la grieta.

La actitud del creyente hacia la familia debe reflejar la religión del Islam; Por lo tanto, tu actitud debe ser de amabilidad, comprensión y tolerancia. Esto se aplica incluso si no pueden ser amables y tolerantes contigo.

Dios dice:

Le he ordenado al ser humano hacer el bien a sus padres. (Corán 29:8)

Asma bint Abu Bakr fue al Profeta Muhammad (PyB) preguntando por su madre.

«Mi madre vino a mí y desea recibir una recompensa de mi parte, ¿debo mantener buenas relaciones con ella?»

El Profeta (la paz sea con él) dijo:

Sí, mantén buenas relaciones con ella.

Explicó que es importante mantener los lazos familiares incluso cuando los miembros de tu familia practican una religión diferente.

Además, el Profeta Muhammad (PyB) nunca ridiculizó ni menospreció las creencias de otras personas.

Por lo tanto, debes imitar su comportamiento y el respeto mutuo debe ser el objetivo de tu relación continua con familiares y amigos.

MUESTRA CÓMO EL ISLAM TE CAMBIÓ

Si puedes, puede ser útil explicar a tus familiares y amigos qué fue lo que te atrajo al Islam y cómo te hace sentir.

A veces, aunque esto puede ser difícil. Quizás no puedas expresar tus sentimientos con palabras. A veces, tus amigos y familiares tienen muchas preguntas, pero no están realmente interesados en la respuesta. En muchas ocasiones, están buscando a la persona que conocen y aman, y están pasando por un evento abrumador propio.

En esta situación, podrías demostrar tu amor por el Islam. Quizás puedas mostrar lo que el Islam significa para ti, en lugar de decirlo.

Si tu familia y amigos pueden ver un gran cambio en ti, uno para mejor, verán que el Islam es una buena influencia y te hace una mejor persona. Tus acciones hacia ellos deben reflejar esto. Sé paciente tanto al aprender tu Islam como al esperar que tu familia y amigos acepten los cambios.

Cuándo y cómo revelar tu Islam es algo que debes decidir después de la oración y la súplica; sin embargo, estate seguro de que Dios no te defraudará. Has sido elegido para una gran bendición, y Dios te guiará a lo mejor, tanto en esta vida como en el Más Allá.

 

Fuente: About Islam